viernes, diciembre 25, 2020

No al comercio de las Leyes de Dios, ni de la Enseñanza del Maestro Ismael...


Malaventurados los que en su dirigencia ocultan tras la bondad de las palabras, la impiedad para los hombres de su pueblo, porqu ellos serán señalados con el dedo de la ignominia en las páginas de la historia” 
–Jorge Eliécer Gaitán-


...A partir de hoy, espero que éste listón Blanco represente y simbolice la Verdad, la Honestidad, la Honradez, la Rectitud, la Pulcritud, el Respeto ante los Mandatos Divinos y la trasparencia de los actuares dentro y fuera de los Estudios; y se grabe profundamente en todas las mentalidades para blandirlo en el momento de defender legado del Maestro ISMAEL GARZÓN TRIANA, de quienes pisotean la Enseñanza perpetuándose, enraizándose, aferrándose a sus cargos, no sólo por su ANSIA DE PODER y de CONOCIMIENTO que egoístamente no comparten, sino también por la DESMEDIDA AMBICIÓN por el bien material que conduce irremediablemente a la CODICIA, y que se desvanece entre aquellas manos inescrupulosas que deshonran la Obra al tomar lo que no ha sido su esfuerzo y no les pertenece. 

Donde haya este tipo de actuares, donde haya preferencias y hegemonía de unos sobre los otros, es claro que no hay espiritualidad; porque mientras unos pocos gozan de comodidades, otros muchos sólo prueban la amargura del sacrificio, de la carencia, de la humillación, al llevar con humildad, con dignidad, la misión, la tarea asignada. Por lo tanto, os digo hermanos de mi espíritu que, sino despertáis de vuestro ensueño, de vuestro letargo ante vuestra comodidad, os haréis tan cómplices como aquellos que llevan por mal camino la Enseñanza del Maestro Ismael con sus malos ejemplos. 

No penséis hermanos de mi espíritu, que la Caridad y la Benevolencia que se debe de tener con el hermano que se hunde en el fango por su ambición y por confundir a Dios por otra cosa, os obliga a hundiros junto a él. Estáis llamados sí, y es vuestro deber pedir la luz para su espíritu, y a extender vuestra mano para ayudarle a salir de aquel lodazal en el que han sumergido sus espíritus; pero si el capricho de la materia lo lleva a complacerse más en los goces materiales que en los espirituales, debéis de clamar al Padre Supremo por ese hermano, y dejarle hasta que el peso de sus propias faltas que laceran aún más las llagas de su espíritu, producto de su libre albedrío, le permitan ante el dolor y el sufrimiento, despertar verdadera conciencia. 

No permitáis ni hagáis parte del mutismo por temor o por amistad, o porque os mueva el interés oscuro de la ambición; porque antes de solucionar, agravaréis un problema, y este terminará por arroparos a vosotros también. 

Por ello pido a toda la Comarca de Directores, Médiumnes, simpatizantes y seguidores de la Enseñanza, difundir este listón para que el mundo entero sepa que, en los ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS es prohibido comerciar con la Obra, cobrar por las labores espirituales; como también así las distinciones entre sus estudiantes, porque donde haya preferencia, siempre habrá injusticia. 

Por lo tanto, sépase que, en la Enseñanza del Maestro Ismael, NINGÚN dirigente o director de recinto debe de vivir a costa de sus hermanos ni de la Obra, porque estaría faltando a la Ley del progreso, convirtiéndose en una carga para los demás. Por lo cual deberá de ganar su sustento; pues muchas veces ante la imposibilidad debe cumplir en ambas partes, ha de anteponerse los deberes corporales para poder dar cumplimiento a los deberes espirituales con verdadera honestidad, luego del deber cumplido en lo material. TAMPOCO está contemplada en la Enseñanza, la disgregación del grupo familiar para partir por imposición a tierras lejanas a cumplir con su deber espiritual, que bien puede también cumplir en la tierra que lo acoge o de donde es nativo, porque ante la ausencia del padre, o de la madre, se rompe aquel vínculo de hogar, se pierde el equilibrio, y es un hogar que se disuelve con relativa facilidad. 

Entonces sabed hermanos míos, que ninguna entidad de luz, como tampoco así el Maestro Ismael, autor de esta Enseñanza, ha ordenado, ni ordenará traslado alguno que implique la desunión de una familia, de un hogar. 

No adoptemos costumbres que no corresponden a los Estudios Astrales Espirituales Ante Dios; porque entonces formularé la siguiente pregunta: ¿Acaso aquellos que se perpetúan en el poder, dejarían su tierra, su familia, su sustento, y la comodidad de sus escritorios para dar ejemplo de abnegación hacia la Obra
Os digo que no, porque ninguno está voluntariamente dispuesto a renunciar a sus mezquinos intereses, ni a las asignaciones de los mejores sitios que deshonrosamente se han proporcionado para ellos y los suyos; y porque bien sabéis que ni mi Padre ni el Maestro Ismael, exigirían semejante cosa. 

Seguid con la complicidad de vuestra indiferencia, de vuestro silencio; y ya veréis cómo, más temprano que tarde, el legado del Maestro Ismael será tan sólo un vago recuerdo en vuestras mentalidades… 

Vuestro amigo, servidor y hermano, 
Héctor Fabio Cardona

Os dejo con la verdadera esencia de la Enseñanza...

(…) No hay secta mala; los malos son quienes dirigen al pueblo que no sabe por dónde van las Leyes Espirituales, Leyes de Dios que han sido enviadas miles y miles de años, pero no ha sido posible que las esclarezcan porque en cada ocasión que ha llegado un mensajero al terrestre lo han perseguido para destruirlo, y su Obra que ha dejado la han confundido, la han extraviado; quiero decir, la han tapado, la han convertido en COMERCIO

En verdad digo que no es necesario vender las Leyes del Supremo Dios, porque Él da el pan de cada día, y paga a cada uno de sus siervos lo que le corresponde. 

Si alguien estuviera interesado en la Ley de Dios, se preocuparía a extenderla sin comerciar con ella

Cuántos hay que poseen las grandes cantidades de riquezas y olvidan que, si esto tienen, es porque de ello mismo pudiera imprimir esas Leyes y darlas a todo aquel amador de Dios; también publicarlas por todos los medios que en el terrestre existen… 

Cuántos son los siervos de Dios que se ocultan entre el dinero, y sólo se acogen en el orgullo de poderes para humillar a otros… 

Entonces ¿qué ha de ser de la vida de estos ESPÍRITUS que, como siervos les han dado todo para divulgar las Leyes de Dios y han hecho lo contrario, han COMERCIADO con las Leyes de Dios el Padre Supremo? por la misma razón confunden esas Leyes y las tapan, para que nadie las comprenda. 

Es muy visible que las Leyes Espirituales que esconden en los grandes álbumes, y como he dicho; las tapan; entonces ¿quiénes son esos espíritus? Y luego, si sale algo a la luz por medio de otro, entonces dicen: ya eso lo sabíamos, porque hace miles de años que esto existe. y entonces ¿por qué tienen al pueblo en la oscuridad? ¿Por qué

Otros se ocupan de criticar a determinadas sectas y decir: la mía es la verdadera. En verdad les digo, verdadera es la Ley Suprema de Dios, cuando se cumple y se hace cumplir

Mientras se ocultan las verdaderas Leyes de Dios, otros toman en sus manos lo que hay en el terrestre para hacer perjuicios, y esto por falta de la verdad; porque habiendo la verdad, todo el mundo se preocuparía y conocería los misterios de la naturaleza, y nunca obrarían los malhechores, porque tendrían quien se opusiera para no permitir todos los destrozos que a diario están cometiendo 

Ismael Garzón Triana...

 

lunes, diciembre 21, 2020

¿A cuál Estudio debo de asistir?




La VERDAD es comparable a esas gotas de lluvia que tiemblan en la extremidad de una rama. En tanto permanecen suspendidas en ella, brillan como los puros diamantes bajo el esplendor de la luz; en cuanto caen al suelo, se unen a todas las impurezas. Todo cuanto nos viene de arriba se ensucia con el contacto terrestre.

-León Denis-

¿A cuál Estudio debo de asistir?
Es la pregunta que muchos se hacen…

Mi respuesta es sencilla; clamad con verdadero amor al Padre Celestial para que despeje vuestros senderos corporales y espirituales para que de la mano de vuestro Guía os conceda llegar a un Estudio, dónde os reciban con un abrazo fraterno, sincero, honesto, dónde os hagan sentir que aquella casa del Padre es vuestra casa también, dónde se realice constantemente por parte del personal que allí labora, un constante esfuerzo a través de buenas acciones encaminadas a combatir el egoísmo en todos sus aspectos para que el orgullo sea doblegado y la soberbia vaya perdiendo poder sobre sus materias, sobre sus mentalidades y sobre sus espíritus. 
Clamad al Padre para que os conceda asistir a un Sitial donde no haya ansias de representación ni hegemonía de unos sobre los otros porque ante nuestro Padre Celestial todos somos iguales; donde aquél que dirige corporalmente esté dispuesto en todo momento a escucharos, a orientaros y ayudaros, pues más que su responsabilidad, es su deber el guiar a sus hermanos por el camino recto, donde los estudiantes estén convencidos que son simples custodios de un conocimiento más no sus dueños, donde todos sacien su sed y aprendan de la misma fuente, donde tengan claro y comprendan que ni una agremiación ni un director corporal es la Enseñanza sino sus representantes, donde sus dirigentes no se perpetúen en sus asignaciones corporales temporales para que ni trafiquen con el poder ni la fe, donde el estudiante estudie la Obra y aprenda del Maestro y no del sentir personal de quien dirige, donde la agremiación y los dirigentes respeten y se rijan con el direccionamiento que a través de los Estatutos dejó plasmado el Autor, donde el Reglamento de la Enseñanza sea la verdadera guía para que no se confunda ni se cambie ni una sola letra de la Obra cuando el dirigente irrespetuoso quiera ser más sabio que el sabio al quitar, al añadir, al modificar lo que fue dictado desde la altura; pero sobre todo, donde todos comprendan que la Obra del Maestro Ismael no se debate, sino que se acata, se honra y se respeta; no por fanatismo ni por idolatría, sino porque ha sido enviada por aquella Majestad Divina.

Cuando halléis un Estudio así, sabed entonces hermanos míos que el Padre Supremo ante vuestro clamor os ha concedido llegar a un Portal esclarecido, a la verdadera Obra del Maestro Ismael donde la humildad, el respeto y la honestidad permiten las grandezas que sólo la voluntad del Padre Celestial concede a través de sus Mensajeros Espirituales emblanquecidos para guiaros, para orientaros como corresponde a la Enseñanza de los Estudios Astrales Espirituales Ante Dios.

Entonces no cometáis el error de ayudar, ni ser partícipes para modificar total ni parcialmente lo que no ha emanado de vuestras mentalidades ni ha sido escrito por vuestra propia mano; no cometáis el error de dejaros convencer de testimonios caducos imprecisos, ni de mentalidades confundidas que pretendan cambiar lo que no se debe de cambiar, pues todo error que infiltréis y pretendáis hacer pasar como parte de la Enseñanza, así como todo error en el que hagáis incurrir a vuestros hermanos por vuestras ansias de reconocimiento, sabed que seréis directos responsables del tal falta, y más temprano que tarde daréis cuenta al Creador de vuestro actuar.

Ciertamente os digo a todos aquellos amadores de las Leyes de Dios y de la Obra que el Padre Supremo ha concedido a través del Maestro Ismael; que si de verdad es vuestro deseo llevar la Enseñanza tal y como la dejó el autor, sólo debéis de regiros, de guiaros por los 15 puntos del Reglamento, los Estatutos, y lo plasmados en el Libro Matriz, así como por aquellos 19 artículos aprobados como Estatutos en la Constitución de la agremiación mientras el Maestro Ismael aún movilizaba materia. Si os conserváis dentro de las líneas de estas directrices, sabed que estáis actuando de acuerdo a la Ley de Dios y de acuerdo a la Enseñanza, que no hay que estar modificándola para no confundir a Dios por otra cosa. Por lo tanto, no confundáis nunca los Estatutos de la Enseñanza que son inmodificables, con los estatutos de la agremiación que han sido y seguirán siendo reformados indefinidamente según el sentir personal del dirigente de turno y sus dirigidos, al confundir el artículo 19 de dicha constitución.

El Padre Supremo no concedió su Obra para el terrestre a través del Maestro Ismael para que fuera sometida a consideración de las voluntades ni del capricho de las materias; nunca lo que ha sido emanado, dictado desde la parte espiritual podrá ser modificado en lo corporal; por lo tanto, todo aquel que sea partícipe o acepte laborar con dichas modificaciones se hace cómplice, y han de saber que no siguen la esencia de la Enseñanza, sino el capricho de las materias… 

Sabed bien hermanos de mi espíritu que “Las Leyes del Padre Supremo y la Obra del Maestro Ismael no adquieren el carácter de verdad porque humano alguno la certifique, ni pierde su esencia por el hecho de que la desnaturalicen, la oculten, la tergiversen o la nieguen. La verdad siempre saldrá a relucir, y siempre habrá corazones dispuestos a acatarla con amor, a honrarla, a respetarla y a defenderla…”

También es muy común ver entre mis hermanos estudiantes, como comparten con agrado y entusiasmo, como imponen costumbres y labores de otras enseñanzas a la Obra del Maestro Ismael, mientras la Enseñanza la tergiversan y la tiene en el olvido. Pero quiero recordar que cada Enseñanza que el Padre Supremo envía al terrestre para el bien de la humanidad, es única; por lo tanto, hay que tener respeto por aquellos Maestros para no confundir ni desvirtuar sus Obras.

Como ya os dije; cada Enseñanza es única, y constituye una falta de respeto espiritual el llevar de aquí y colocar allá, o el traer de allá para pretender implantar acá; además demuestra inconstancia, ignorancia, falta de amor y convicción en el estudiante. 

Si tanto os gusta, si tanto os atrae aquellos temas, sé honestos con vosotros mismos y dedicaos a esclarecer aquellas enseñanzas; pero os digo que no es correcto lo que hacéis porque faltáis el respeto a aquellos Maestros, y de paso pisoteáis la Obra del Maestro Ismael.

Debéis de definiros para ser verdaderos estudiantes sea de la obra que sea, esto no os convierte en sectarios; por el contrario, os hace firmes en vuestros senderos al tener claridad del camino elegido, y os hace grandes por el respeto que mostráis hacia otras enseñanzas, porque no penséis hermanos de mi espíritu que más sabe el que más conocimiento acumula, sino el que honra y aprovecha el que posee

“Todas las semillas sembradas tendrán que producir, porque los Estudios tienen que seguir; que no queden en tierras estériles o mal cultivadas, porque esta Obra no puede ser pisoteada, pues de mí han sembrado una espina, y han hallado una caricia.” Ismael Garzón Triana... 

La inconstancia no deja que ninguna semilla germine” 

Vuestro amigo, hermano y servidor,
Héctor Fabio Cardona

 

martes, diciembre 08, 2020

Manera de los espíritus llevar las cruzadas en el terrestre...


Convencido estoy, que cada palabra dispuesta en la Obra ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, son eslabones forjados y concatenados bajo el crisol inmutable de la Verdad, perfectamente alineados e inamovibles; pero al transportar en la mentalidad un eslabón de un párrafo, de una página, otro de otra, y así sucesivamente con sumo respeto, sin orgullo ni vanagloria, unido a el estudio honesto, serio e investigativo, despojado del ansia de reconocimiento y de poder, que precisa y requiere la Enseñanza para expandirla y darla a conocer con claridad ala humanidad, procurando cada nuevo día aislarse de los vicios para que esta grandiosa Verdad sea sembrada, cultivada y enaltecida en el corazón de cada ser humano, trabajando laboriosamente para alcanzar la tranquilidad, la frescura del corazón hasta colmarlo de verdadero amor, de respeto hacia un Padre Creador de todo cuanto ha sido, es y será, cumpliendo y haciendo cumplir sus mandatos sin imposición, SIN CONFUDIR LA FIRMEZA CON EL ATROPELLO, sino a través del ejemplo moral de sí mismo dentro y fuera de los Estudios; será la llave de amor y de fe, que aquél Pescador de almas, el Gran Maestro PEDRO PESCADOR DEL GALILEA concederá para abrir las puertas que estén cerradas, y así adquirir el discernimiento y la comprensión necesaria para extractar y componer infinitos mensajes de amor, de tolerancia, de benevolencia, de indulgencia mediante el conocimiento que se permita adquirir a quienes aspiran a prestar el servicio a sus hermanos en el nombre de Dios Todo Poderoso, como también para quienes realmente anhelen aprender sin tener que modificar ni desvirtuar lo que ha sido enviado desde la altura.

“La verdad es comparable a esas gotas de lluvia que tiemblan en la extremidad de una rama. En tanto permanecen suspendidas en ella, brillan como los puros diamantes bajo el esplendor de la luz del Sol; en cuanto caen al suelo, se unen a todas las impurezas. Todo cuanto nos viene de arriba se ensucia con el contacto terrestre” 
-León Denis-

Os pregunto: ¿Cuántas de las veces hacemos lo contrario de lo que se clama ante la parte espiritual…?

PUNTOS DE OBSERVACIÓN.
“Yo os prometo Padre mío seguir el camino hacia la Luz Divina, yo os pido señor, participar de la Luz Divina. Yo que soy uno de tus siervos el más pequeño, pido la sabiduría, y la inteligencia me cubra para servir en su nombre a todo aquél que quiera ese favor de mi Padre Celestial…” pero no cumplimos…
(…) -Esclarecimiento-
Muchas de las veces leemos las plegarias, así como las 39 páginas y otros segmentos que componen la Obra de los ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, y otras enseñanzas, o simplemente al haberlas memorizado las pronunciamos mecánicamente de labios para afuera sin que el corazón tome parte en ello para elevar verdaderamente con amor la mentalidad al Padre Supremo; pero a pesar de que nuestra materia pueda estar presente en el recinto dirigiendo una labor; nuestro espíritu está ausente recorriendo parajes distantes, a donde le enviamos con el pensamiento ante la falta de interés y concentración. Entonces recordad siempre que, “Donde se encuentre el pensamiento, ahí estará el espíritu” Por lo tanto, muchas veces no somos conscientes de ese momento porque nuestro espíritu está ausente por la falta de concentración; entonces repetimos automáticamente lo que ya está almacenado en nuestra mente corporal. El abrir un portal para una labor sin estar preparado, el clamar sin estar dispuestos a cumplir, puede llevarnos a adquirir nuevas causas, porque mientras pedimos al Padre, al mismo tiempo estamos aceptando y comprometiéndonos con lo recibido.

Os explico: Si a pesar de prometer seguir el camino de la luz, y pedir la participación de la Luz Divina, así como el compromiso de servir con amor a todo aquél que quiera el favor de nuestro Padre Celestial, incumplimos; este actuar nos hará simplemente impostores, e hijos ingratos ante Dios. Lo mismo acontece cuando repetimos y coreamos a diario en los recintos de oración, con los ojos humedecidos: “Mi corazón sólo siente ese amor hacia mi Padre Celestial y hacia mis hermanos que muy extraviados están” Os digo hermanos míos; fuerte y poderoso compromiso el que conlleva estas palabras, esta afirmación, y falta grave ante el Padre Celestial y ante la Verdad, de aquél espíritu que en los Recintos de Oración dobla rodilla, clama y pide por la humanidad, pero que fuera de él, se alza en el orgullo de poderes para humillar a otros, al despreciar y mirar con recelo a aquél hermano caído en desgracia, que subyugado por los vicios y espíritus oscurecidos que le rodean, actúa contrariamente a los Mandatos Divinos; cuando deberíamos como siervos al servicio espiritualmente del Padre Supremo, hacer honor, dignificar y dar fiel cumplimiento a aquel párrafo donde escrito está que “Inclinarse hacia Dios por toda la humanidad; recordar tantas deudas que debemos cancelar ante Dios, y causa espiritual” Es el ejemplo, la forma correcta de encaminar a los espíritus por la senda de la Luz y Verdad. Sin embargo, la soberbia cubre el espíritu con su capa sombría desviándolo del camino recto, incumpliendo así un Juramento y olvidando los deberes espirituales y la Enseñanza, que es la parte por la cual está al servicio del Padre supremo.

"La oscuridad no puede expulsar a la oscuridad, sólo la luz puede hacer eso. El odio no puede expulsar el odio, sólo el amor puede hacer eso". "Todo lo que afecta a uno directamente, nos afecta a todos indirectamente". MARTÍN LUTHER KING

“Yo pido al Supremo Creador, que los rayos de la luz nos cubran y sean curados los pacientes en el nombre de mi Padre Celestial; porque la Caridad y el Amor llegue a todos los corazones donde hay la palabra de Dios” ISMAEL GARZÓN TRIANA

Como veis hermanos de mi espíritu, es simple de entender que, mientras alberguemos recelo en nuestros corazones y actuemos con odio, con orgullo, con soberbia, con hipocresía, con vanagloria, con envidia, señalamiento, o juzguemos a los demás; sólo seremos impostores de una Ley Divina, porque aquellas facultades y dones concedidos a los siervos al servicio espiritualmente de Dios para llevar luz, conocimiento, amor, verdad, curación y sanación para los espíritus y las materias, sólo tendrán el verdadero anclaje espiritual, cuando la luz nos cobije, y las sombras oscuras sean alejadas de nuestro camino; sólo entonces podremos llamarnos verdaderos siervos al servicio de Dios.

“Estudiad palabra por palabra, y os entregaré nuevas páginas; dijo el Maestro Ismael”.

(…) He de aclarar a mis hermanos, que el esclarecimiento que respetuosamente presento ante vosotros de la humilde Enseñanza que legó a la humanidad el Maestro Ismael, está cimentada principalmente en la misma Obra, y del recuerdo de lo aprendido por mi espíritu, así como de los mensajes de los Maestros y otras obras; y que si bien, mi espíritu y materia no ha logrado despojarse aún de la oscuridad ni del capricho para ser digno estudiante de esta hermosa filosofía espiritual; mi esfuerzo y mi empeño sí está encaminado en buscar con afán para hallar un día el camino recto que me permita ingresar a la senda de la luz; no sin antes expiar y sufrir en carne propia, el mal que he causado a mis hermanos en el pasado y en el presente, porque escrito en el camino de la verdad, quiero pedir que mis penas sean más cortas y mi materia más fuerte, ya que las deudas que tengo contraídas no las desconozco, y servir quiero como mí Padre Eterno lo tenga dispuesto.

Sin atribuirme absolutamente nada, os comparto este mensaje, este conocimiento que es luz para el espíritu, recibiendo lo necesario para cumplir así su misión, porque para estos tiempos ya fue plasmada de acuerdo con la etapa y el progreso del hombre, la Ley de Dios.

La Enseñanza puede parecer sencilla ante los ojos de la materia; por eso muchos la desprecian y la pisotean, pero en verdad os digo que es sublime y grandiosa ante la vista espiritual. Todo se concatena perfectamente entre las 39 páginas, plegarias, y demás segmentos que la componen; por ello, los posibles desaciertos en las explicaciones que os presento, mal haría atribuírselos a la Enseñanza; más sí, a mi errada interpretación de las Leyes Espirituales ante mi falta de estudio y preparación; por ello pido perdón a mi Padre, que es el único que, junto a mi consciencia puede juzgarme.

PARA REFLEXIONAR
“Sólo sé que las páginas escritas no son mías, son de la Ley de Dios, que a todos las extiendo con aquel cariño; pues sólo soy un trabajador de Dios, que ha elegido para estos Estudios”

“¿Qué será de mí si no soy humilde, y si no entrego la enseñanza, o la represento, pero no la enseño? ¿Tendré acaso deuda por esto? ¿…y ofenderé la gracia de Divina, que después de tener todo, por soberbia pierda la cabeza y de campo al espíritu enemigo y no a la gracia de Dios que es la que puedo perder? ISMAEL GARZÓN TRIANA

Entonces hermanos míos, aprendamos que “Sólo unidos podremos mejorar lo que está mal, continuar con lo que está bien, y hacer lo que nunca se ha hecho…”
No desfallezcamos, clamemos por nuestros hermanos amigos, y principalmente por nuestros hermanos enemigos, porque la recompensa no está en el intento, sino en resultado final de nuestras acciones…

MANERAS DE LOS ESPÍRITUS LLEVAR LAS CRUZADAS EN EL TERRESTRE.

(…) -Enseñanza- Es sabido que el espíritu es una partícula de Dios, y se coloca en el corazón de cada criatura. Por lo regular, el ser humano lleva tres espíritus, divididos en las siguientes
formas:
(…) -Esclarecimiento- Se dice cruzada, porque al caer el espíritu a la Tierra toma la materia que es una cruz irradiada por los diferentes Astros de la Creación.
Cuando el espíritu toma materia queda cruzado hasta volverse a purificar; o sea hasta desmaterializarse.
El espíritu al ser creado por el Padre Supremo a su imagen y semejanza, su esencia es la luz; razón por la que el espíritu evolucionado, esclarecido, desencarnado y liberado de toda atadura carnal, carece de forma humana; por ello quienes tienen la facultad de ver a través de los ojos del espíritu y no de la materia, podrán percibir los espíritus de dos formas diferentes:
(1) Como un destello de luz colorido, a los espíritus desencarnados esclarecidos, evolucionados; y/o con forma corporal, cuando éstos deseen a través de su Periespíritu, evocar el recuerdo corporal de la cruzada con la que estime conveniente presentarse a la vista del facultado.
(2) Con forma humana cuando ve el alma o Periespíritu; o sea el espíritu encarnado, porque éste está prisionero en la armadura pasajera, ligado mediante un lazo fluídico al cuerpo físico.

(…) -Enseñanza- El que va en el corazón es el legítimo que nos moviliza, y el responsable de los hechos.
(…) -Esclarecimiento- El espíritu reposa en el corazón del cuerpo Astral, o sea en el Periespíritu, es la luz, la fuerza que moviliza la materia. Mediante el libre albedrío y a través de los hilos conductores de su periespíritu, irradia y transmite su pensamiento a la materia, por lo que es éste, quién dará cuenta al Padre Supremo de todas sus acciones; es decir, el responsable de los hechos.

(…) -Enseñanza- Los otros dos: El uno, es el Guía, QUE ES DEL COLOR DEL PLANO QUE LE CORRESPONDE; éste anota y lleva la estadística del bien que se haga. Éste se llama guía o Ángel de la guarda.
(…) -Esclarecimiento- El segundo espíritu es el Guía o Ángel de la Guarda que el Padre Supremo concede a cada espíritu. De acuerdo al plano de donde es nativo, a la misión que deba cumplir, a la expiación que deba sobrellevar; y según lo que tenga ganado, así mismo le asignan el guía. Este hermano que actúa como guía y protector, pertenece a los planos Superiores y es el encargado de registrar en el libro de las estadísticas de cada espíritu, las buenas acciones realizadas por su protegido.

Nota: no se debe asumir erróneamente la condición de espíritu evolucionado por parte del espíritu encarnado, cuando le es permitido conocer que su guía no es un representante del Arcángel, sino directamente el Rector del Plano de Luz, según de donde sea nativo. No se debe interpretar esta asignación como guía exclusiva para espíritus evolucionados; porque el Arcángel, aquél gran Maestro, en su bondad, en su deseo de ayudar a salir adelante a un hermano que se encuentra alejado del camino de la luz, clama al Padre Supremo por aquel hermano que necesita mucha más ayuda para cumplir su misión, y le acompaña en su difícil cruzada para fortalecerle; más nunca como una preferencia de su condición espiritual.

(…) -Enseñanza- El tercer espíritu es el obsesor que lleva una vara, y en ésta anota todo el mal que se hace. Éste pertenece a la faz de la Tierra; o sea que éste pertenece a las fuerzas bajas. Éste, cuando el Ángel de la guarda se retira, entra como guía para esa materia produciendo sólo el mal, y así hasta llevarlo a los planos de la oscuridad.
(…) -Esclarecimiento- Este hermano a quien se designa como obsesor, es el encargado de registrar las malas acciones; y cuando el espíritu encarnado se empecina en el mal, cuando se deja arrastrar por la mentira, el orgullo, la soberbia, las bajas pasiones, la envidia, la avaricia, la deshonestidad, etc., el hermano obsesor entra como guía de esa materia allanándole, facilitándole el camino hacia los vicios para fascinarlo, posteriormente someterlo, y por último subyugarlo para desviarlo del camino recto, hasta conducirlo a los planos de la oscuridad. Cada falta cometida, cada pensamiento o deseo de maldad repercute en la moralidad del espíritu, con lo cual se oscurece el periespíritu, opacando, cubriendo su luz.

(…) -Enseñanza- Los tres espíritus partículas de Dios de acciones diferentes, son espíritus iguales y también son perfectos; lo único, es la misión que desempeña cada uno. Pues el primero es el de la cruzada que busca su elevación, y el segundo lo guía para llevarlo a el Padre Eterno; pero éste es muy delicado, no permite que vaya sucio, porque limpio del pecado es más liviano. Y con el pecado sólo puede pertenecer a los Planos de la oscuridad.
Así que el tercer espíritu trabajador también de Dios, desempeña la parte del castigo para los hijos ingratos que sólo ambicionan la maldad.
(…) -Esclarecimiento- El espíritu que viene a movilizar materia, el Ángel guía, y el obsesor; cada uno cumple su misión.
El primero encarna para limpiar su espíritu a través de las pruebas que le sean asignadas, así como de la expiación que debe sobrellevar por las faltas cometidas en el pasado, y aún en el presente, para poder quitar las capas oscurecidas con las cuales ha cubierto su espíritu, teniendo que vivir en carne propia todo el mal que ha infringido a sus hermanos, y así buscar la perfección; es decir, evolucionar.
El segundo cumple la misión de guiar a ese espíritu encarnado para que pueda emprender el vuelo; éste orienta, pero no obliga, dejando que el libre albedrío de su protegido se manifieste en toda su magnitud. Pero todo aquél que quiera regresar a Dios tendrá que limpiar su espíritu, porque de lo contrario el peso de las faltas no le permite subir a los planos de luz, que son las escalas que debe alcanzar hasta llegar a la diestra del Padre Supremo.

Entre menos virtudes tenga el espíritu, más se aferrará al plano Tierra, y más fuerza de gravedad ejercerá el planeta sobre su densa materialidad.

El tercer espíritu acompañante; o sea el obsesor, es el encargado del correctivo por las deudas contraídas, por el mal que se haya causado; como también el encargado de perturbar, de obsesionar las mentalidades para desviar del camino recto.

(…) -Enseñanza- También llega el día que Dios no permite que aquel hijo ingrato se hunda más en el fango de la Tierra; entonces manda de nuevo al Ángel, o sea el guía, para ayudarlo a limpiar del pecado. Entonces se producen las enfermedades que sólo con el arrepentimiento y el comprendimiento de las deudas que hay que pagar; quedando a paz y salvo, éste se cura.
(…) -Esclarecimiento- Cuando el espíritu se encuentra abatido por el peso de sus faltas y está cautivado, conquistado y subyugado por los vicios que lo llevaron a desmoralizar, a oscurecer su Periespíritu y a hundirse en el fango de las bajas pasiones ganando así planos de dolor y sufrimiento hasta quedar imperfecto; entonces Dios que es tan buen Padre lo recuerda con cariño y envía de nuevo al Ángel guía para ayudarlo, pero el arrepentimiento y el deseo de cambiar por sí solos, no son suficientes para levantar las capas oscurecidas; y como las deudas contraídas son tantas, que no han sido canceladas, entonces se presentan todo tipo de miserias; y sus enemigos, espíritus encarnados y desencarnados, realizan el cobro de las deudas a través de enfermedades, que muchas de las veces sólo pueden ser curadas espiritualmente, para que así comprenda que es a causa de las faltas cometidas, las cuales ha de pagar a través del dolor en su propia materia. Sólo cuando éste quede a paz y salvo de la deuda, la causa es levantada, el Periespíritu sana, y éste transmite la curación a la materia. Lo que afecta a la materia repercute en el Periespíritu; y la deuda que traiga el espíritu, es trasmitida del Periespíritu a la materia en forma de enfermedad, aunque la materia sea tierna, o se encuentre aún el vientre de la madre.

(…) -Enseñanza- Entonces es la tragedia, porque las deudas que hay pueden ser muchas. Y ¿Cómo pagar las deudas que hay en tanto miles de años?
Entonces son los reconcilios de espíritu a espíritu, porque las Leyes son perfectas y no permiten engaño. Nadie puede alegar que su espíritu ha venido imperfecto o sucio, porque todos han llegado iguales a la Tierra; perfectos y limpios.
(…) -Esclarecimiento- Como las deudas acumuladas en distintas cruzadas son muchas; entonces la desdicha, las persecuciones espirituales, la humillación, el sufrimiento, el dolor, azotan la materia y afligen el corazón; y al ser ignorante de aquella verdad oscura y olvidada del pasado, muchos se preguntan ¿POR QUÉ SI HAY UN DIOS, POR QUÉ ME TIENE ASÍ?

Para saldar tantas deudas contraídas en miles de años, sería necesario igual o mayor número de años de expiación y sufrimiento; pero el Padre que en todo momento vela por sus hijos, concede a través de los Tribunales Espirituales, y por intermedio de sus siervos en el terrestre, o sea los Médiumnes parlantes o videntes con capacidades espirituales, intervenir entre espíritu encarnado y espíritu desencarnado para que haya el reconcilio entre los espíritus; y así con el arrepentimiento y con el perdón de Dios, quedan desligados y libres, cumpliéndose la Ley inmutable, Ley natural, Ley Divina del Perdón.

Las verdaderas Leyes Espirituales son perfectas y están establecidas desde el el principio de los tiempos para el bien de la humanidad, y para vivir en paz como verdaderos hijos de un mismo Padre Creador.

Hermanos de mi espíritu; sabed que el conocimiento de las Leyes espirituales nos ayuda a preservarnos del mal; por lo que es ignorancia el culpar al Padre Supremo por el mal que nos aqueja como resultado de los errores cometidos bajo nuestro libre albedrío; pues son nuestras decisiones las que nos encamina por la senda de la luz o el de la oscuridad. Nada de lo que hagamos queda impune ante las Leyes de Dios.

La ignorancia puede llevarnos a pensar, que si nadie nos está observando cuando mentimos, cuando nos apoderamos de aquello que no nos pertenece, cuando derramamos la sangre de nuestros hermanos, cuando utilizamos los conocimientos espirituales para comerciar con ellos, para doblegar o para causar mal a nuestro prójimo en secreto; nadie lo sabrá. Pero en verdad os digo hermanos míos, que todo cuánto se dice, se hace o se ve, queda registrado en el libro de las estadísticas espirituales de cada hijo de mi Padre; y todo será tomado en cuenta en nuestra siguiente cruzada; y de acuerdo al mal que hayamos causado, así mismo será la expiación que deberemos sufrir.

Si por ambición o avaricia en el pasado, despojamos a nuestro hermano de sus bienes materiales, de igual manera seremos despojados en nuestro presente trasegar, de aquello que con gran lucha y esfuerzo hayamos conseguido. Si por envidia o por maldad fuimos talanquera en el pasado de un hermano, así mismo sufriremos aquel rigor de persecución tanto espiritual como corporal. Y aunque no se debe de generalizar al tomar una asechanza como expiación, que por envidia o maldad se realiza sin tener deuda con quién la produce; cierto es, que el sólo hecho de estar encarnados, ya constituye una causa, y si no es uno, será otro quién se interponga en nuestro camino. Así mismo, si por cobardía ante el agobio, ante el sufrimiento moral, o el dolor de la enfermedad decidimos quitarnos la vida; tened en cuenta que deberemos regresar con el mismo mal que nos afligió, y repetir la cruzada, con el agravante de que al haber interrumpido temporalmente la expiación de aquella causa cuyo cobro se manifestó a través de la enfermedad, se suma la de cortar la vida a la materia que moviliza nuestro espíritu.

Ejemplo; quién se quita la vida disparándose en la cabeza; tal y como partió de este plano terrenal con su cerebro físico dañado por el proyectil justo antes de cortar el fluido vital, regresará en su próxima cruzada con grandes limitaciones en su función cerebral. Igual para quienes en su orgullo y vanidad mutilan o injertan en su materia elementos extraños a la naturaleza de su cuerpo para gozar de una belleza pasajera.
Así mismo, todo aquél que, a causa del vicio del alcohol, del tabaquismo, de la drogadicción, de la prostitución, desgaste, degenere o dañe sus órganos, su cerebro, sus arterias, su corazón, etc., etc.; deberá como expiación a su falta, sufrir los efectos de la deficiencia, de la decadencia en su salud corporal en una vida futura, tanto como haya dañado cada órgano de aquel templo de su espíritu.

Tened presente hermanos míos, que en la condición en que parte el espíritu, así mismo volverá; pues la muerte de la materia no acaba las causas, sólo las interrumpe mientras volvemos a movilizar materia. Entonces, si partimos esclavos de los vicios, volveremos esclavos de ellos; si partimos siendo esclavos del opresor, esclavos seremos en la erraticidad, y esclavos volveremos de ellos; cuando por temor, por complicidad o falta de voluntad, nos sometamos a quienes causan mal a la humanidad. Por lo tanto, no permitáis que nadie os subyugue, ni tampoco subyuguéis a nadie; porque esa condición la viviréis en la erraticidad, y en vuestro regreso a la materia.

¿Cuántos somos los que, desde las primeras horas de vida corporal, y aún desde el vientre de nuestra madre, hemos padecido a través del sufrimiento, de la enfermedad, de la desnutrición, del abandono, las causas como consecuencia de nuestras acciones pasadas?
Os digo que somos millares; sólo que la materia no conoce el pasado de su espíritu…

Vuestro hermano, amigo y servidor,
-Héctor Fabio Cardona-
-Héctor Fabio Cardona-