miércoles, octubre 28, 2020

Paso firme y decidido en la lucha por la libertad sublime, por la Ley Astral, Espiritual y Universal...


PASO FIRME Y DECIDIDO EN LA LUCHA POR LA LIBERTAD SUBLIME, POR LA LEY ASTRAL, ESPIRITUAL Y UNIVERSAL

La Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, fue entregada desde la altura a través del Maestro Ismael Garzón Triana, único autor de esta Enseñanza, para el bien de la humanidad; por lo tanto, ningún humano está facultado ni tiene el poder ni el conocimiento ni la autoridad moral para modificar parcial ni totalmente su contenido.

Todo cambio que se realice en las Fechas, en las Plegarias, en la Última Página, en las 39 Páginas, en la Rotación Astral a partir de 1967, en los días y horarios de las labores asignadas directamente por el Maestro, o en cualquiera de sus segmentos; ha de elevarse enérgicamente la voz de protesta, rechazar tal abuso, tal atrevimiento, y remitirse al Libro Matriz, no a al sentir de la mente extraviada del humano soberbio y orgulloso que pretende estar por encima del mismo autor.

Hermanos de mi espíritu; no os conforméis con lo primero que os presenten a vuestra vista, ni con lo primero que os hagan llegar a vuestros oídos. Sabed que sois custodios de la Obra de nuestro amado Maestro Ismael; y recordad que desde el momento que diste vuestro juramento ante el Padre Supremo, no ante una materia, os convertisteis en Soldados defensores de la Divina Causa.

Bien sabéis hermanos míos que en este espacio se os comparte el conocimiento de las Leyes del Padre Supremo contenidas en la Enseñanza del Maestro Jesús del Galilea, Ismael Garzón Triana, la codificación del Maestro Allan Kardec, León Denis, Camilo Flammarión, Maestro Gandhi; y demás Mensajeros enviados al terrestre para traer luz a este plano terrenal, sin engaño, sin fanatismo, sin idolatría ni subterfugio alguno, y sin atribuirme nada que no me corresponda; pero si vuestra presencia en este espacio abierto para todo aquel amador de Dios, y mi amistad os causa problemas, enemistades o persecuciones; entonces cerrad vuestros ojos, vuestros oídos, vuestro entendimiento, agachad vuestra cabeza y marchad, que yo sabré comprender vuestras razones, vuestros temores e indecisiones; porque como bien dijo Martín Lutero:

QUIÉN QUIERA QUE ESTIME SU DOCTRINA, FE, Y CONFESION COMO RECTA Y VERDADERA; NO PUEDE PERMANECER EN EL MISMO ESTABLO CON EL ERROR O ADHERIR A LA FALSA DOCTRINA...UN MAESTRO QUE PERMANECE MUDO CUANDO SE ENSEÑA EL ERROR, Y NO OBSTANTE PRETENDE SER UNA MAESTRO DE LA VERDAD, ES PEOR QUE UN FANÁTICO DESCARADO, Y CON SU HIPOCRESÍA HACE MÁS DAÑO QUE UN HEREJE…”

Con estas frases, MARTIN LUTERO dio un paso decisivo poniendo la palabra de Dios al alcance del pueblo a pesar de la persecución de los sectarios de aquella época, que hasta ese instante se oponían sin fundamento alguno; y sí, llenos de soberbia, orgullo, egoísmo, y además mercaderes de la fe, impidiendo a los hijos de mi Padre nutrirse con sus mensajes y orientarse con sus Leyes, como también así con la enseñanza del humilde Jesús del Galilea, Maestro de Maestros por excelencia, que pretendieron ocultar a toda costa.
Y hoy nosotros, estudiantes de la Enseñanza ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, llamados a luchar por la LIBERTAD SUBLIME, por la LEY ASTRAL, ESPIRITUAL y UNIVERSAL, no podemos amedrentarnos, porque tenemos la responsabilidad, y estamos en el deber de empuñar las armas del conocimiento para que no se repita en tiempo presente la historia cuando aquellos sectarios del pasado que por más de XVIII siglos no sólo ocultaron y quemaron grandes obras de conocimiento, sino que además persiguieron con sevicia y enviaron a la hoguera como castigo, a todo aquél que publicaba las verdaderas Leyes de Dios en palabras y en hechos, como ocurrió a JUANA DE ARCO.

JESÚS publicó la Verdad. En público hizo curaciones por medio de irradiación; por lo cual fue perseguido y crucificado por enseñar la LEY NATURAL, LEY INMUTABLE, LEY DIVINA; aún en tiempos más difíciles que los nuestros…

Os pregunto hermanos de mi espíritu ¿Acaso os habéis detenido a reflexionar, aunque sea por un breve instante sobre el hecho de que, mientras a vosotros se os “sugiere” o se os prohíbe abiertamente escudriñar, leer o estudiar tales o cuales Obras, ellos sí estudian, si se instruyen, si se culturizan y si avanzan en el camino del conocimiento, mientras vosotros vais quedando rezagados tras las migas que deseen compartiros?

Tened siempre presente que el maestro imperfecto y egoísta nunca querrá que su alumno le iguale en conocimiento, ni mucho menos le supere en sabiduría; porque la envidia espiritual le enceguece y no le permite reconocer que todos los espíritus son iguales, con la diferencia del ascenso para cada uno y las cruzadas, y lo que debe hacer en el terrestre.

Hoy, por la misma razón confunden esas Leyes y las tapan para que nadie las comprenda; pero conociendo aquel actuar oscuro, infame y mentiroso del pasado; os exhorto hermanos míos a que antes de obedecer ciegamente a quienes os dirigen, indaguéis en vuestros corazones si aquello que se os orienta o se os prohíbe es conforme a las Leyes Espirituales, a la verdad y a la voluntad del autor de esta hermosa Enseñanza; como también sobre la razón o el motivo que condujo ¡NO SÉ A QUIÉN! a asegurar en otrora, que era causa terrible para el espíritu dar a conocer la Obra, cuando plasmado está lo contrario en el Libro Matriz; pero que hoy, cuando las conciencias empiezan a despertar, cuando han empezado a “desobedecer” a derribar mitos, costumbres y actuares que no corresponden a la Enseñanza; de la noche a la mañana se hace válido expandir a los cuatro vientos lo que antes prohibían sin fundamento y sin sustento en las Leyes Espirituales; sin dar hasta el momento una coherente explicación de su postura egoísta del pasado…

() “Ya que su serenísima majestad y sus altezas exigen de mí, una respuesta sencilla, clara y precisa, voy a darla, y es ésta; yo no puedo someter mi fe ni al papa ni a los concilios, porque es tan claro como la luz del día, QUE ELLOS HAN CAÍDO MUCHAS VECES EN EL ERROR, ASÍ COMO EN MUCHAS CONTRADICCIONES CONSIGO MISMOS. Por lo cual, si no se me convence con testimonios o con razones evidentes, y si no se me persuade con los mismos textos que yo he citado, y si no sujetan mi conciencia a la Palabra de Dios, yo no puedo ni quiero retractar nada. Heme aquí; no me es dable hacerlo de otro modo.” ¡Que Dios me ayude! MARTÍN LUTERO

Claro es, que el hombre que no busca denodadamente el conocimiento que es luz para el espíritu, para así alejar la ignorancia que es oscuridad para el alma, terminará nutriéndose con el error ajeno y con verdades a medias que son peor que la mentira misma.
 
Os digo hermanos míos, si no estudiáis las Leyes de mi Padre, la charlatanería de otros será encantadora melodía para vuestros oídos, y susurro adormecedor para vuestros sentidos, porque como dijo también Martín Lutero:

LA FACULTAD DEL OÍDO ES UNA COSA SENSIBLE; MUY PRONTO SE SACIA Y AL POCO TIEMPO SE CANSA Y SE ABURRE

Por el bien de vuestros espíritus, espero que cuando decidáis despertar de aquel ensueño no sea demasiado tarde ante el tiempo asignado para cada uno de vosotros en este plano, y no hayáis ingerido en demasía, el germen del error, para que podáis arar y desarraigar a tiempo aquellas raíces infestas que no permiten ni dan espacio a la germinación de la buena semilla, para que haya así mismo en vuestros corazones la fertilidad, la cosecha abundante de facultades esclarecidas para ponerlas el servicio de la humanidad, así como la abundancia de amor, de paz, de comprensión, de honestidad, de humildad, de conocimiento y de respeto hacia vuestros hermanos; pero principalmente hacia aquella Majestad Divina, para que llevéis con virtud como verdaderos siervos al servicio espiritual ante un Padre Supremo, las Leyes Espirituales a todos vuestros hermanos; y aunque cierto es que “NO SE PUEDE OBLIGAR A ALGUIEN A COMPRENDER UN MENSAJE QUE NO ESTÁ LISTO PARA RECIBIR; AÚN ASÍ, NUNCA DEBEMOS DE SUBESTIMAR EL PODER DE PLANTAR UNA SEMILLA

Si no os esforzáis por escudriñar, investigar y esclarecer los Mandatos Divinos, seréis simples marionetas movidas por las falacias e intereses de aquellos soberbios que creen ser más sabios que el mismo sabio, y que, en vez de engrandecer y dar gloria a una Enseñanza, la desprestigian y la desvirtúan por sus yerros, imprecisiones, despropósitos y charlatanería.

Entonces os pregunto ¿Por qué entreteneros hermanos míos con el árbol, cuando ante vosotros está la majestuosidad del Bosque? ¿Acaso ignoráis que todos sois maestros en potencia porque Dios está en cada uno de vosotros?

Sólo os digo, preguntad, indagad, investigad todo lo que se os compartan como una verdad, para que no seáis conducidos como borregos al abismo de la confusión y del engaño; inquirí, refutad, interrogad de dónde emana tal o cual concepto; exigid las referencias de donde se ha tomado aquello con lo cual se os orienta, con el fin de que vosotros mismos podáis constatar e ir a saciar vuestra sed de conocimiento directamente del mismo manantial de donde aquellos también sacian su sed, porque lo que es bueno para unos, no puede ser malo para otros y viceversa; y así comprobar por vosotros mismos si efectivamente el conocimiento que os comparten es de la altura, o es iniciativa de una materia…

NO CONFUNDÁIS EL GRAN ESPÍRITU DE VERDAD con aquella oscuridad del pasado, con aquellos espíritus que se hicieron imperfectos por su propia culpa, y culpa de quienes los guiaron en el terrestre en su forma corporal. EL ESPÍRITU DE VERDAD es la esencia pura del conocimiento de las Leyes del Padre Supremo, no ningún espíritu encarnado en el pasado ni aún en este presente; entonces no pretendáis encerrar dicha esencia en una materia corrupta y perecedera con nombres de hombres del pasado.

Vuestro hermano, amigo y servidor,
-Héctor Fabio Cardona-


lunes, octubre 19, 2020

Luz del Universo

 

¡Padre…! Me inclino respetuosamente ante tu amada presencia para presentarte mi agradecimiento por todo el bien recibido; por concederme la luz de un nuevo un día, un día más de vida en este plano Tierra y en mi materia, como oportunidad para levantar las capas oscurecidas con las cuales yo mismo he cubierto mi espíritu; y que hoy son aquellas piedras de tropiezo, aquellos sufrimientos, aquellas talanqueras que he puesto en mi camino tanto corporal como espiritual al trasgredir las Leyes en el pasado y en el presente, faltando a el respeto en diferentes formas a mis hermanos; razón por la cual he clamado vuestro permiso para encarnar y trasegar en este plano Tierra con el fin de trabajar para el progreso, para la evolución de mi espíritu, y así un día ganar tu Luz Divina Padre Misericordioso. 

Os te clamo Padre mío, me concedas la fortaleza, la firmeza de espíritu; como también la asistencia de mi Ángel Guía y espíritus benefactores para afrontar mis pruebas o mis expiaciones según mis faltas cometidas; y así poder cumplir la misión que me ha sido asignada. 

Os te pido que la Luz y el vibrar de tu Espíritu Divino sea en mi espíritu, para reconocer tus Divinos Mandatos para evitar el señalamiento, las malas costumbres, y el capricho de materia, ya que como encarnado ignoro el pasado de mi espíritu, como también las causas por la cuales me encuentro en deuda con mis hermanos.  

Concédeme Padre Misericordioso el conocimiento, la inteligencia y la sabiduría, a través del estudio, para servir a mis hermanos en vuestro nombre; y os clamo tu Divina Piedad para que éste vuestro hijo ingrato, retome el sendero de la luz para estar de nuevo a vuestro lado, cuando en un tiempo y en otro tiempo, logre limpiar mi espíritu. 

Señor; concédeme la asistencia de mi Divina Madre para que me cubra con su manto Luz, de protección y de amor, para que mi corazón esté libre de ansia de poder, libre de envidia, de malos sentimientos, pero con la frescura y el reposo que se requiere para estar en paz conmigo mismo, con todos mis hermanos, y lleno de verdadero amor por ti en todo momento; y así, en aquél instante de alegría y gozo por la intuición de mi liberación, cuando mi espíritu esté próximo a desligarse de mi materia, ser digno de invocar tu nombre Divino, llamarte Luz del Universo, reconocerte como mi Padre Creador, e implorar la protección, así como el perdón para mi espíritu por todo el mal que haya podido causar. Y antes de entregar mi armadura pasajera a este paraíso terrenal, perdonar a todos mis hermanos por el mal que haya recibido, clamar la luz para mis enemigos, para poder trascender y no quedar aferrado por soberbia ni por venganza a este plano Tierra. Y si me correspondiera por causa o por misión retornar a este plano de expiación, de sufrimiento, y prisión para los espíritus; entonces concédeme la oportunidad de prepararme en aquellas Universidades espirituales para adquirir conocimiento, ante de retomar materia, y llegar a un hogar donde puedan educarme y corregirme desde temprana edad mediante las Leyes Espirituales, las Leyes Morales, y servir con amor, con respeto, con honestidad a mis hermanos, en vuestro nombre… 

Vuestro hijo; 

Héctor Fabio Cardona

lunes, octubre 05, 2020

El Alma


Señora de su destino, el Alma tiene que atenerse al estado de cosas que preparó, que escogió. Todavía, después de haber hecho de su conciencia un antro tenebroso, una cueva del mal, tendrá que transformarlo en templo de luz. Las faltas acumuladas harán nacer sufrimientos más vivos; se sucederán más penosas, más dolorosas encarnaciones; el círculo de hierro se apretará hasta que el Alma triturada por el engranaje de las Causas, de los Efectos que hubiera creado, comprenderá la necesidad de reaccionar contra sus tendencias, de vencer sus pasiones ruines y de mudar de camino. Desde ese momento, por poco que el arrepentimiento la sensibilice, sentirá nacer en sí, fuerzas, impulsos nuevos que la llevarán hacia medios más adecuados a su obra de reparación, de renovación, y paso a paso irá haciendo progresos. 

Rayos y efluvios penetrarán en el Alma arrepentida y enternecida; aspiraciones desconocidas, necesidades de acción útil y de dedicación, han de despertar en ella. La ley de atracción que la impelía hacia las últimas camadas sociales, revertirá en su beneficio y se tornará el instrumento de su regeneración.
Entre tanto, no será sin costos que ella se levantará; la ascensión no proseguirá sin dificultades. Las faltas y los errores cometidos repercuten como causas de obstrucción en las vías futuras, y el esfuerzo tendrá que ser tanto más enérgico y prolongado, cuánto más pesadas fueran las responsabilidades, cuánto más extenso hubiera sido el período de resistencia y obstinación en el mal. En la escabrosa y escarpada subida, el pasado dominará por mucho tiempo al presente, y su peso hará doblar de una vez los hombros del caminante; más de lo alto, manos piadosas se extenderán hacia él y lo ayudarán a transponer los pasajes más escarpados. “Hay más alegría en el Cielo por un pecador que se arrepiente, de que por cien justos que perseveran.”

Nuestro futuro está en nuestras manos y nuestras facilidades para el bien aumentan en razón directa a nuestros esfuerzos para practicarlo. Toda vida noble y pura, toda misión superior es el resultado de un pasado inmenso de luchas, de derrotas sufridas, de victorias ganadas contra nosotros mismos; es el remate de largos y pacientes trabajos, la acumulación de frutos de ciencia y caridad cogidos uno por uno en el curso de las edades.

Cada facultad brillante, cada virtud sólida reclamó múltiples existencias de trabajo oscuro, de combates violentos entre el espíritu y la carne, la pasión y el deber. Para llegar al talento, al genio, el pensamiento tuvo que madurar lentamente a través de los siglos. El campo de la inteligencia penosamente educado, al principio apenas dio escasa cosecha; después, poco a poco vinieran los sembradíos cada vez más ricos y abundantes.

En cada regreso al Espacio se procede al balance de los lucros y pérdidas; se evalúan y se fijan los progresos. El ser se examina, se juzga, investiga minuciosamente su historia reciente escrita en sí mismo; pasa revista a los frutos de experiencia y sabiduría que su última vida le proporcionó, para marcarles más profundamente la sustancia.

La vida del Espacio es para el Espíritu que evoluciona, un período de examen, de recogimiento, en que las facultades después de haberse gastado en el exterior, reflexionan, se dedican al estudio íntimo, al interrogatorio de la consciencia, a un inventario riguroso de la belleza o fealdad que hay en el Alma. La vida del Espacio es la forma necesaria y simétrica de la vida terrestre; vida de equilibrio en que las fuerzas se reconstituyen, en que las energías se retemplan, en que los entusiasmos se reaniman en que el ser se prepara para las futuras tareas; es el descanso después del trabajo, la bonanza después de la tormenta, la concentración tranquila y serena después de la expansión activa o del conflicto ardiente.

Según la opinión de los teósofos, el regreso del Alma a la carne se efectúa de mil quinientos en mil quinientos años. Esta teoría no es confirmada ni por los hechos ni por el testimonio de los Espíritus. Estos interrogados en gran número en medios muy diferentes, respondieron que la reencarnación es mucho más rápida; las almas ávidas de progreso se demoran poco en el Espacio. Piden el regreso a la vida de este mundo para conquistar nuevos títulos, nuevos méritos. Poseemos sobre las existencias anteriores de cierta persona, indicaciones recogidas en puntos muy alejados unos de otros, de boca de médiums que nunca se conocieran, indicaciones perfectamente concordantes entre sí y con las intuiciones del interesado. Demuestran que apenas veinte, treinta años cuando mucho, separaran sus vidas terrestres. No hay en cuanto a esto, regla exacta. Las encarnaciones se aproximan o se distancian según el estado de las Almas, su deseo de trabajo y adelantamiento y las ocasiones favorables que se les ofrecen; en los casos de muerte precoz, son casi inmediatas.

Sabemos que el cuerpo fluídico (Periespíritu) se materializa o purifica conforme a la naturaleza de los pensamientos y de las acciones del Espíritu. Las Almas viciosas atraen hacia sí, por sus tendencias, fluidos impuros que les vuelve más espeso el envoltorio y les disminuye las radiaciones. Después de la muerte no pueden elevarse por encima de nuestras regiones y quedan confinadas en la atmósfera o mezcladas con los humanos; si persisten en el mal, la atracción planetaria se vuelve tan poderosa que les precipita a la reencarnación. Cuanto más material y grosero es el Espíritu, tanto más influencia tiene sobre él la ley de la gravedad; con los Espíritus puros cuyo Periespíritu radioso vibra a todas las sensaciones del Infinito y que encuentran en las regiones etéreas medios apropiados a su naturaleza y a su estado de progresión, se produce el fenómeno inverso.

Llegados a un grado superior, esos Espíritus prolongan cada vez más su estadía en el Espacio, las vidas planetarias se vuelven para ellos la excepción, y la vida libre la regla; hasta que la suma de las perfecciones realizadas los libere para siempre de la esclavitud de los renacimientos.