sábado, octubre 29, 2022

viernes, octubre 28, 2022

La ignorancia de los engañados de la Tierra...


«Mi propósito es entregar lo que a mí me han enviado, todo por la gracia del Supremo Dios Infinitamente Justo» 
Ismael Garzón Triana...

() Las ondas del tiempo van, vienen, se alejan y retornan, transportando lluvia de recuerdos de las memorias del pasado, que una vez emanadas de las mentes, inician su viaje como todo pensamiento, desplazándose por el espacio infinito en un ciclo perpetuo, surcando mundos, siendo percibidas, captadas por mentalidades receptoras de aquella estela de conocimientos que tuvieron lugar en tiempos a, en planos distantes, como también de este plano terrenal. Es la musa de los tiemposes la Aurora del nuevo amanecer que trae a las mentalidades las ideas a través de la inspiración, de la intuición, del conocimiento esparcido en el espacio; cuando no, del recuerdo mismo, de las páginas de su propio espíritu que empieza a despertar.

Oleadas de geniosespíritus radiantesvisitantes del Cosmos Infinito, llegan a revestir sus espíritus con la materia constituida con los elementos, con las partículas de la atmósfera de los mundos donde han de habitar, para nacer a la vida corpórea en cumplimiento de sus misiones, de sus tareas asignadas para llevar evolución a los planos más atrasados a través de las Leyes del Padre Supremo Creador de todo cuanto existe.

Cada espíritu Mensajero de aquella Luz del Universo, plasma según los medios disponibles, según la evolución del plano en que habita, los Mandatos Divinos sin añadir ni quitar, entregando lo que se le ha encomendado en la parte espiritual.

Por lo tanto, además de representar un irrespeto hacia el Padre Supremo, constituyen también falta grave para el espíritu de aquél o de aquellos que tergiversan o son partícipes en el cambio o modificación de una Enseñanza espiritual enviada desde la altura, al creerse más sabio que aquél que, en cumplimiento de una misión asignada por el Padre Supremo, ha entregado lo ordenado para todos sus hijos en en la Tierra.

La Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, plasmada por el propio puño y letra del autor Ismael Garzón Triana, no ha de someterse a concilio ni a debate alguno para cambiar o modificar su esencia parcial o totalmente. No está sujeta a “actualizaciones” ni a estudio, ni a esclarecimiento ni a discernimiento ni a interpretación grupal ni individual, que pueda llegar decretar la autorización del más mínimo cambio a la Enseñanza, porque son Leyes inmutablesLeyes esclarecidas, pero mal interpretadas por sectarios.

La Enseñanza Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, fue emanada de aquella Mente Divina Universal, de aquella Majestad Divina, no de la precariedad de la mente humana; por lo tanto, no la contaminéis, no la pisoteéis con la soberbia, con el orgullo, al creeros superiores al Maestro que la recibió y la legó para el bien de la humanidad sin interés alguno.

«No os encauséis modificando lo que no ha de ser modificado, ni aquello que no ha sido escrito por vuestra propia mano…»

Vuestro amigo, hermano y servidor,
Héctor Fabio Cardona...

martes, octubre 25, 2022

Ahí dejo mi Obra para que, el que esté limpio de limpie más...


Ciertamente la Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, fue dejada para el bien de la humanidad, para que a través del conocimiento de las Leyes Espirituales seamos conscientes de que ninguna falta, ninguna ofensa, ninguna deuda contraída en lo espiritual queda sin pagar. Entonces, al ser conocedores de dichas Leyes, tendremos la oportunidad de aislarnos gradualmente de los vicios, transitar por el camino recto, y así el que esté limpio, cada día se limpiará un poco más mediante sus buenas decisiones, mediante el respeto, amor y perdón hacia sus hermanos.

Igual acontece con el espíritu que se empecina en el mal, que, llegando a la Obra, en vez de aprovecharla para limpiarse de las capas oscurecidas que pesan sobre él, lo que hace es utilizar el conocimiento adquirido en la Enseñanza para causar mal a sus hermanos, sirviendo dicho conocimiento y estancia en la Obra, para enlodar aún más su ya oscurecido espíritu.

Así mismo he de deciros que, el humano ha hecho de este plano, de este mundo que lo sustenta, un verdadero campo de batalla, donde así se revuelca como fiera salvaje, agrediéndose mutuamente por ambición, por animadversión, por envidia, por ansias de poder como la religión o la política.

Así que debéis de saber que todo el odio, la persecución, las calumnias que lanzáis en contra de vuestros hermanos, os hará acreedores a grandes causas para vuestro espíritu; como debéis de saber también, que toda esta guerra sucia entre campañas que estáis atizando y ayudando a propagar hablando mal de quienes no piensan como vosotros, es una de las muchas formas de revolcaros en el fango de este mundo de oscuridad.

Os ufanáis diciendo que conocéis las Leyes Espirituales, los Mandatos Divinos, pero aun así agredís, aborrecéis y calumniáis a vuestro hermano. Hacéis ostentación de la Ley del Perdón, cuando no perdonáis a vuestros hermanos, porque sois incapaces de perdonaros y de reconciliaros con vuestro propio espíritu.

NO HAGÁIS A VUESTRO HERMANO NO LO QUE QUERRÍAIS QUE SE OS HICIERE A VOSOTROS

(…) Ante todo, quiero expresaros mi respeto como hermanos de mi espíritu, como estudiantes defensores de la Divina Causa; y recordaros que, bajo aquella gravedad de Juramento que entregamos un día ante el Padre Supremo, NO ANTE NINGUNA MATERIA, comprometimos nuestra palabra, nuestro empeño, nuestra lucha y nuestra voluntad en CUMPLIR SUS MANDATOS Y HACERLOS CUMPLIR; pero no hacerlos cumplir a través de la imposición, ni del orgullo de poderes o del sometimiento para doblegar las voluntades a nuestros hermanos, sino a través de nuestro propio ejemplo; por qué si no cumplimos primeramente nosotros, ¿Cómo pretendemos hacer cumplir a nuestros hermanos?

Si me lo permitís, empezaré por decir que las Leyes Divinas son Inmutables, que aquello que fue ayer en lo espiritual, es hoy, y será mañana así mismo; por lo cual pido humildemente a todos los que somos cimiente y esparcidores de la Obra del Maestro Ismael en ésta nuestra presente cruzada, hacer un alto en nuestro trasegar; mirar hacia atrás, y hacer un recuento, un balance de nuestras acciones, sobre ¿QUÉ HEMOS HECHO HASTA EL MOMENTO EN LA OBRA, Y POR LA OBRA DEL MAESTRO ISMAEL? ¿Acaso hemos cumplido a cabalidad con nuestro deber y nuestra responsabilidad? ¿Qué está haciendo cada uno de nosotros para engalanarla, para darla a conocer sin orgullo, sin fanatismo y sin egoísmo? ¿La enseñanza y el conocimiento adquirido de las Leyes morales y espirituales nos ha servido para aislarnos de los vicios con el propósito de limpiar nuestros espíritus, o, por el contrario, sólo nos ha servido para acogernos en orgullo de poderes para HUMILLAR y someter a nuestros hermanos con caprichos de materia ante la envidia espiritual? LAS SEMILLAS QUE SE NOS HA CONFIADO ¿Cuántas de aquellas han sido simplemente arrojadas, y cuántas hemos sembrado y cultivado con verdadero amor?
Porque no es sólo sembrar; nos debemos también a la acción constante de cultivar para que ese fruto germine buenamente como está establecido. ¿Cuántos estudiantes cumplen un Reglamento? ¿Cuántos lo incumplimos? ¿Cuántos hemos ingresado a la Obra con el anhelo de progreso, de cambio, de bienestar? y ¿Cuántos a través de los años hemos enlodado aún más nuestro espíritu, y lo hemos ennegrecido en vez de haberle dado destellar y luz, teniendo todo en nuestras manos? ¿Cuántos hermanos hemos conquistado con amor, con entrega, con ejemplo, con Indulgencia, con aquella Caridad y Piedad como lo enseña la Obra? y ¿A cuántos hemos alejado por el mal ejemplo, con el desprecio, con el despotismo, con el desdén, con el orgullo, la soberbia y la jactancia que, en vez de aliviar heridas las irrita? ENTONCES ¿Cómo podremos clamar Benevolencia en la hora de nuestras angustias, si aún aquello que recibimos en abundancia y gratuitamente en virtudes y conocimiento, lo guardamos egoístamente solo para nosotros y los nuestros con la justificación de salvaguardar la Enseñanza? Pero os pregunto ¿De qué, o de quién queremos defenderla, si no es de nuestro propio egoísmo, que al no compartir el pan espiritual con nuestros hermanos que tienen hambre y sed de conocimiento, nuestro recipiente recibe, recibe, y recibe hasta derramarse sin provecho alguno para nuestros hermanos?

No nos ahitemos con tanto saber, porque seguramente terminaremos por indigestarnos hasta entorpecer nuestras mentalidades por egoístas. Actuamos como aquél que sirve ostentosamente su mesa; pero que, si pensara un poco en sus hermanos, alcanzaría también para ellos y sobraría; pero finalmente el ojo puede más que el estómago, así como el ansia de poder y la AVARICIA DE CONOCIMIENTO puede más que el compromiso de nuestro juramento.

¿Cuántos son los que estudian la manera de ir a Dios, pero olvidan que todos somos hermanos como espíritus, hijos de un mismo Padre Creador de todo cuanto existe?

Os digo hermanos de mi espíritu, que sin el respeto ni el cumplimiento de las Leyes espirituales, de las Leyes Morales, las virtudes más esclarecidas y el conocimiento más elevado, sólo sirve a el espíritu para perderse, para encausarse al creerse único, escogido, encumbrado, y mucho más digno que sus hermanos para recibir las bondades del Padre Supremo, llevándolo a beber del Manantial en las mejores copas, y reservando para sí, un conocimiento que en la mayoría de las veces no comprende, sólo cree que lo ha ganado, que lo ha heredado; así suele pensar el orgulloso y arrogante estudiante que desprecia a sus hermanos.

No toméis estas palabras como señalamientos ni imputaciones de mi parte; tomadlas como una invitación a la reflexión constante que requiere la prestación del Servicio con amor a nuestros hermanos y en el nombre de aquella Majestad Divina; y si nuestro obrar es correcto y en conformidad a la Ley y a la Enseñanza, podremos tener la certeza que nuestros corazones estarán frescos, reposados, así como nuestros espíritus más aliviados y nuestras mentalidades mucho más esclarecidas también; pero si nuestro proceder es errado; ¡ay! de nosotros que juramos cumplir, que pedimos, que clamamos, que nos beneficiamos, que prometemos compartir; pero que una vez adquirimos el conocimiento lo guardamos, y olvidamos a nuestros hermanos.

Muchos de vosotros os preguntaréis: ¿Quién es “ése” que apenas sí divisa un sendero, una enseñanza, y ya cree ser poseer del conocimiento y la moral para señalar? Yo os digo hermanos míos; no señalo al humano, más señalo el mal que circunda a la humanidad, porque soy un estudiante como los sois vosotros, y no vengo a formaros, porque como dijo el Maestro Sócrates “NO PUEDO ENSEÑAR NADA A NADIE, SÓLO PUEDO HACEROS PENSAR.” Tampoco vengo a incomodaros, simplemente traigo puntos de observación sobre lo que es correcto, y de aquello que no lo es, porque como espíritu encarnado he venido a saciar mi sed de conocimiento en este Manantial que es esta Magna Enseñanza, tal y como lo hacéis vosotros también; vengo a buscar la Luz para mi espíritu que se encuentra fatigado de trasegar, retrasando mi progreso ante la terquedad de mi materia, vegetando en un estancamiento triste, sin rumbo, y opacado por mi errado proceder del pasado. Vengo a instruirme en la verdad que mi Padre Celestial extiende sobre todos sus hijos, y no en el concepto personal de ninguna materia ni agremiación alguna. Tengo el firme propósito de aprovechar la oportunidad que se me concede a través de esta humilde Enseñanza y de los tribunales espirituales, para el reconcilio y desligar del mayor número de deudas contraídas en mi pasado y mi presente ante mis hermanos, y no para echar más fango sobre mi espíritu con odios sin sentido, con egoísmos ni resentimientos, ni para extender nuevos pagarés a mis deudores; pero sobre todo, he venido para estudiar y laborar en bien de la humanidad para dar fiel cumplimiento al Juramento que he dado ante el Supremo Dios Infinitamente Poderoso y Justo, comprendiendo que las Leyes y Estatutos de la enseñanza, son la guía Divina en este Plano Tierra para el fiel servicio en la Obra, para no dejarme arrastrar por el capricho de mi materia, porque mi mentalidad no está por encima de aquella Fuente Divina a dónde venimos a saciar la sed, a donde venimos a adquirir Conocimiento, a instruirnos para obtener luz para nuestros espíritus, alivio a los quebrantos y agobios de nuestras materias, como también el de nuestras almas; y no para tergiversar lo entregado desde la altura.

Entonces ¿Por qué pretender imponer costumbres, caprichos, y no la verdadera Ley establecida en la Obra enviada por nuestro Padre Celestial?

Bien sabemos que han sido entregadas unas indicaciones que son guías esclarecidas plasmadas en el Libro Matriz, orientaciones para ser cumplidas, y así poder ser ejemplo con nuestros actuares, para aquellas almas que ya están, y aquellas que vendrán a refugiarse en este faro de Luz de LOS ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, como en toda enseñanza venida del Padre Supremo; y no para laborar según nuestro criterio, según nuestro estado de ánimo, o según nuestros afanes o nuestras ansias, porque entonces cargaremos con la culpabilidad del error en el que hagamos incurrir a nuestros hermanos.

Os digo; la humildad, la firmeza de pensamiento y de obra, conduce hacia el camino recto librándonos de males innecesarios; mientras que el orgullo, la pereza, la decidida y la envidia espiritual, conduce por la senda de la confusión, impidiendo el cumplimiento, o cumpliendo sólo a medias un compromiso, un juramento. “ES MEJOR SER UN BUEN SEGUIDOR DE LA ENSEÑANZA, Y NO UN MAL MÉDIUM” dijo un hermano.

Cada espíritu es conocedor de sus sentimientos, de sus fortalezas, y también de sus faltas; por eso os digo que, “ASÍ COMO UNA LÁMPARA NO NECESITA DECIR QUE EMITE LUZ, LAS BUENAS PERSONAS TAMPOCO NECESITAN DECIR QUE LO SON”, siendo innecesario defenderse de las injurias que excitan nuestros ánimos, porque el ejemplo es la mejor defensa.

No os resintáis con éste, vuestro hermano aprendiz, cuando en ocasiones escribe en tercera persona como si pretendiese ser ajeno a estas palabras; por el contrario, lo hago con la idea de hacer parte del gran público para evidenciar mis propios errores, asumiendo lo que me corresponde de responsabilidad en mi errata; necesitando aquella figura, aquella narrativa de mis propias faltas, imaginando que es mi consciencia quien da lectura continua a aquello que nadie quiere decirme; pero que mi razón sí hace con espléndida propiedad, utilizando estas líneas que nacen de mi propio espíritu, con la necesidad imperiosa de auto-educarme; ya que la mayoría de las veces se ha impuesto el capricho de mi materia…

No os convirtáis nunca en piedra de tropiezo ni talanquera para ninguno de vuestros hermanos, porque ciertamente os digo; disfrutaréis hoy de vuestra perversidad, de vuestra animadversión, pero mañana será el crujir de dientes; y hasta no cancelar hasta el último céntimo de vuestras deudas espirituales contraídas, no podréis liberaros de esta doble prisión para el espíritu, que es la materia pasajera, y este plano de expiación que os ha correspondido habitar.

Vuestro amigo y servidor,
-Héctor Fabio Cardona-


¿Qué esperáis hermanos de mi espíritu para abrir los ojos…?


No os digo que señaléis, que persigáis a nadie; pero sí os digo, exigid el cumplimiento de las Leyes Espirituales, de lo estipulado en el Reglamento Interno y en los Estatutos de la Obra.
Como también os digo; en ocasiones, el guardar silencio ante las necedades, es virtud propia de sabios, en otras, defecto y efecto de la complicidad.

 EN TIERRA DE CIEGOS EL TUERTO ES REY

En estos tiempos de desinformación, vemos como surgen sabios en toda parte y en toda forma. La mayoría de ellos cree, y además aseguran saberlo todo, y por ello de todo hablan y opinan sin tener fundamento ni el conocimiento para hacerlo, conduciendo a muchos al error.
Vemos en las redes sociales a muchas personas opinando sobre política, economía, astronomía, medicina, derecho, tecnología, cuántica, deporte, religión, espiritismo, filosofía, botánica, bolsa de valores, etc., etc., etc., etc., etc., etc., etc., y hasta del Big Bang. "Todo lo hablan, todo lo explican porque todo lo comprenden"

Cabe anotar que, a este grupo de sabios, acuden también a engrosar aquellas filas, los representantes, dirigentes y estudiantes de la Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios; que, “COMPRENDIENDO” muy bien la Enseñanza, terminan por considerarla poca cosa, y por ello la relegan y deciden hablar, explicar compartir y dar a conocer otras ciencias, otros conocimientos, porque se avergüenzan de la sencillez y humildad de la Obra. Pero cuando alguien diferente a ellos quiere compartir la Enseñanza, darla a conocer, lo persiguen, lo censuran, lo deslegitiman silenciosamente; no porque éste, ése o aquél no comprenda la Obra, sino porque “sólo ellos deben, pueden, y están autorizados a hacerlo”.

Cuando ciegos fanáticos guían a otros más ciegos y más fanáticos, fácilmente caen en la confusión, porque éstos no explican las Verdaderas Leyes de Dios, sino aquello que suma reconocimiento, prestigio y adulación, y que solo sirve para sumir aún más en la ignorancia a quienes son guiados en su forma corporal. Por ello, a pesar de tener todo dispuesto para adquirir el verdadero conocimiento, muchos de mis hermanos prefieren las bagatelas, lo insustancial; porque si las comparte, si las da a conocer el dirigente en sus perfiles de las redes sociales, entonces son válidas y verdaderas; cuando el dirigente debería, porque así es su compromiso, prepararse mediante el estudio de los Mandatos Divinos para explicar a sus dirigidos de acuerdo a la Ley Espiritual, no de acuerdo a su ignorancia ni a su sentir, el porqué de la vida, el porqué de las enfermedades que solo se curan espiritualmente, el porqué de las persecuciones, de las envidias y malquerencias. Pero no, lo verdadero lo tapan, lo ocultan, lo censuran, y por ello la copa ha sido rebosada por la ignorancia, complacencia, pereza y desidia de la humanidad misma; que adormecida acepta ciegamente lo que le imponen.

Observo a aquellos dirigentes que me deslegitiman con sus malsanos comentarios y prohibiciones a mis hermanos; y entonces puedo comprender por qué la Obra de mi amado Maestro Ismael no avanza en su esencia, que es darla a conocer y servir a toda la humanidad.

Os invito a reflexionar, a eliminar de vuestro entorno, todo aquello que os desvíe del camino recto; a eliminar de vuestras mentalidades aquellos condicionamientos que vuestros dirigentes han arraigado en vosotros.

-Sabed, que el árbol se conoce por sus frutos; así mismo el hombre se da a conocer por sus palabras-
No calléis, no asintáis mansamente lo que os pretendan asignar o imponer; estudiad, comparad con las Leyes Espirituales, con las Leyes Morales, todo lo que dicen, todo lo que orientan, todo lo que publican y comparten; y preguntad porqué persiguen a quién comparte la Obra si es la misma que ellos CUSTODIAN, cuando ellos mismos no lo hacen estando llamados en deber espiritual a realizarlo.

Os invito a hojear lo que yo comparto de la Obra, y si hayáis cosa contraria a la Enseñanza, decidlo; así mismo os invito a visitar, a hojear lo que aquellos comparten, y preguntadles ¿Qué relación tiene lo que enseñan y comparten, con los ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS?

Unos por desinformación, otros por pereza y decidía, y otros por falta de amor, no han podido o no han querido abrir sus ojos.

Finalmente os pregunto; ¿Qué es aquello que os avergüenza de la Obra, para preferir hablar de otras enseñanzas, y no de la que estáis al servicio?

-Héctor Fabio Cardona-

viernes, octubre 21, 2022

No ven la verdad ni la realidad porque tienen atrofiada la luz del espíritu



Ruego el favor de silencio, porque se trata de obtener tiempo para decir las cosas que tengo que decir: ¿Qué nos pueden decir cuando estamos realizando la batalla de una nueva expresión y de una nueva realidad
Que tiemblen los vacilantes, yo me siento y sé que estoy respaldado, pero si no lo estuviera tengo que repetir aquí la frase “Más vale una bandera limpia solitaria sobre una cumbre, que cien banderas tendidas sobre el lodo”
-Jorge Eliécer Gaitán-

(…) Una vez más comparto este texto con vosotros, hermanos de mi espíritu...

Dad al César lo que es del César:
Entonces los FARISEOS se fueron, y consideraron entre sí, cómo le sorprenderían en lo que hablase. - Y le envían sus discípulos juntamente con los herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres veraz y que enseñas el camino de Dios en verdad, y que no te cuidas de cosa alguna; porque no miras a la persona de los hombres. - Dinos pues, qué te parece; ¿Es lícito dar tributo al César, o no?
Mas Jesús, conociendo la malicia de ellos, dijo: ¿Por qué me tentáis hipócritas? -Mostradme la moneda del tributo. Y ellos le presentaron un denario - Y Jesús les dijo: ¿De quién es esta figura e inscripción? - Dícenle: del César, dijeron los FARISEOS. Entonces Jesús les dijo: "Pues pagad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios". Y cuando esto oyeron, se maravillaron, y dejándole, se retiraron.

La cuestión propuesta a Jesús fue motivada por la circunstancia de que, teniendo los judíos horror al tributo impuesto por los romanos, lo habían hecho cuestión religiosa, formándose un partido numeroso para negárselo: el pago del tributo era para ellos, pues, una cuestión irritante de actualidad, sin lo cual la pregunta hecha a Jesús: "¿No es libre el pagar o dejar de pagar el tributo al César?" no hubiera tenido ningún sentido. Esta pregunta era un lazo; porque según su respuesta, esperaban excitar contra él, ya sea a la autoridad romana, ya a los judíos disidentes. Pero, “Jesús, conociendo su malicia", elude la dificultad dándoles una lección de justicia, diciendo que a cada uno debe dársele lo que le corresponde.

Esta máxima: "Dad al César lo que es del César" no debe entenderse de una manera restrictiva y absoluta. Como todas las enseñanzas de Jesús, es un principio general resumido bajo una forma práctica y usual, y deducido de una circunstancia particular: Ese principio es consecuencia del que dice que debemos obrar respecto a los otros como quisiéramos que éstos obrasen con respecto a nosotros; condena todo perjuicio material y moral causado a otro, toda violación de sus intereses, y prescribe el respeto a los derechos de cada uno, como cada uno desea que se le respeten los suyos; se extiende al cumplimiento de los deberes contraídos con la familia, la sociedad, la autoridad, lo mismo que con los individuos.

Por ningún motivo hermanos de mi espíritu admitáis el sometimiento de vuestras voluntades, de vuestro libre albedrío, de vuestra libertad de expresión y de pensamiento; pues evidentemente hoy estáis subyugados, os han esclavizado mansamente como borregos, valiéndose de vuestro temor, de vuestra ignorancia, de vuestra pereza mental y desidia. 
Recordad lo que hoy os digo hoy hermanos de mi espíritu, si continuáis sin estudiar, sin esclarecer vuestras mentalidad para comprender los Mandatos Divinos, mañana harán lo mismo con vuestros espíritus, porque si hoy les consentís esto, mañana no tendréis voluntad ni carácter para resistiros a los atropellos venideros.

Me dirijo a aquellos que se encuentran sometidos y os digo; alzad vuestra mirada al Padre Supremo para clamarle la luz para aquellos hermanos que hoy os han esclavizado mal interpretando, mal utilizando vuestro amor y obediencia a la Enseñanza; dobla rodilla, inclinad vuestra cabeza, haced reverencia ante aquella Majestad Divina, más nunca ante los hombres, porque sois espíritus y no polvo…

¿Qué puede importar que la OSCURIDAD doblegue nuestras materias pasajeras mientras no dobleguen nuestros espíritus imperecederos, porque ciertamente estamos sostenidos por el Padre Supremo y al servicio del Padre, y no al servicio ni sostenidos por quién comercia con las Leyes Espirituales?

Entonces os digo; pensad una y dos veces y tres veces y más, el apoyo que daréis en aquel, vuestro concilio, en aquel vuestro cónclave próximo a realizarse, y sé consientes que lo derivado de vuestro consentimiento o de vuestra omisión o silencio por cobardía, en el momento de decidir cambiar la esencia, el nombre o el contenido de la Obra ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, tendrá recompensa si actuáis correctamente, o consecuencias sobre vuestros espíritus sino lo hacéis. Sabed que si cambiáis tan sólo una tilde, una letra de la Enseñanza del Maestro Ismael Garzón Triana, la estaréis desvirtuando y os haréis acreedores a grandes causas. -GRAN CONMEMORACIÓN LA QUE LA QUE ESTÁIS GESTANDO EN NOMBRE DEL MAESTRO, DESVIRTUANDO, TERGIVERSANDO SU LEGADO-

De aquellos que creen ser más sabios que el mismo sabio como para cambiar, modificar o reemplazar parcial o totalmente esta Obra; huid de ellos, dejadles solos y que, con su erudición y su gran conocimiento, se inspiren y escriban a su amaño, a su antojo, su obra personal que puedan manipular, extender y comerciar como ellos ansían.

Os repito una vez más; la Obra del Maestro Ismael no es una RELIGIÓN, es una hermandad espiritual. Así mismo nuestros recintos no son iglesias y nunca lo serán; son Estudios.

Como dijo el Maestro Jorge Eliécer Gaitán - “NO VEN LA VERDAD NI LA REALIDAD PORQUE TIENEN ATROFIADA LA LUZ DEL ESPÍRITU"

Al igual que dijo MARTÍN LUTERO “(…) “Ya que su serenísima majestad y sus altezas exigen de mí, una respuesta sencilla, clara y precisa, voy a darla, y es ésta; yo no puedo someter mi fe ni al papa ni a los concilios, porque es tan claro como la luz del día, QUE ELLOS HAN CAÍDO MUCHAS VECES EN EL ERROR, ASÍ COMO EN MUCHAS CONTRADICCIONES CONSIGO MISMOS. Por lo cual, si no se me convencen con testimonios o con razones evidentes, y si no se me persuade con los mismos textos que yo he citado, y si no sujetan mi conciencia a la Palabra de Dios, yo no puedo ni quiero retractar nada. Heme aquí; no me es dable hacerlo de otro modo.” ¡Que Dios me ayude! MARTÍN LUTERO

Vuestro amigo, hermano y servidor,
-Héctor Fabio Cardona-

jueves, octubre 20, 2022

¿Qué podré ofrecer Padre mío si todo lo que hay es tuyo?


 
En los ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS, suele decirse:
¡PADRE MÍO! SOY MOZO PEQUEÑO
-Palabras vacías, letra muerta, un decir nada más entre nosotros los ingratos; porque contrario a la Enseñanza, nos sentimos grandes, altivos, orgullosos y poderosos ante los mansos de corazón-
Y SOLO DESEO, MI PLEGARIA SEA RECIBIDA.
-Si no hay humildad, respeto, caridad, benevolencia y amor en nuestro corazón, ninguna oración llegará al Padre Supremo, porque quién no ama y respeta al hijo, tampoco ama ni respeta al Padre-
HAY EN MI CORAZÓN UNA LUZ A TU SERVICIO, RUEGO ME PERMITA SER SU MENSAJERO, PUES SERVIR QUIERO EN SU NOMBRE.
-Un espíritu que se ha ennegrecido por su propia culpa al dejarse conquistar por el odio, por el resentimiento, por el señalamiento, por la envidia y la malquerencia; ¿Qué luz podrá haber en él, para prestar el servicio en el nombre de Dios a la humanidad?
¿QUÉ PODRÉ OFRECER PADRE MÍO, SI TODO LO QUE HAY ES TUYO?
-Mientras por un lado reconocemos que somos simples átomos en el basto Universo, partículas diminutas que no tenemos nada que ofrecer más, que nuestro amor, nuestra fe, nuestra confianza y convicción en aquella Majestad Divina; por otro lado, por un mínimo de conocimiento primitivo adquirido, nos creemos únicos, superiores, distinguidos, y dueños de las Leyes del Padre Supremo, así como amos arrogantes, señores y propietarios de esta hermosa Enseñanza.
POR LO CUAL PADRE MÍO, HÁGASE SU VOLUNTAD Y NO LA MÍA.
-Nos damos golpes de pecho, doblamos rodillas, clamamos, pedimos, imploramos al Padre Supremo, dizque por nuestros hermanos; pero ciertamente no cumplimos con lo dispuesto en las Leyes espirituales para alcanzar tan noble fin, porque mientras los Mandatos Divinos orientan para guiarnos por el camino recto y así cumplir la voluntad de Dios Todopoderoso infinitamente Justo; lo que hacemos es justificar, excusar nuestro mal proceder, rehuir al verdadero conocimiento, sólo para continuar imponiendo nuestra voluntad y capricho de materia.
SEÑOR Y PADRE NUESTRO
-Identificamos que sólo hay un Señor, que sólo hay un Padre Supremo de donde han emanado todos los espíritus; por lo cual aceptamos que todos somos hermanos. Sin embargo, diariamente nos faltamos al respeto de hermano a hermano por la envidia y el deseo de superar, lo cual nos lleva a actuar como hijos ingratos que, conociendo la verdad, preferimos quedarnos con la mentira-
SOY EL MÁS PEQUEÑO DE TUS HIJOS, ELQUE MENOS TIENE SABIDURÍA Y EL QUE MENOS TIENE INTELIGENCIA.
-Queda plenamente demostrado que leemos la Obra o quizá la hemos aprendido de memoria para recitarla mecánicamente, pero no la estudiamos, y por ende no la comprendemos. Por ello, las palabras salen de los labios, más no de nuestros corazones; porque sí verdaderamente obrásemos de acuerdo a lo plasmado en esta hermosa Enseñanza, entenderíamos que, a mayor conocimiento, mayor humildad, pero no tenemos ni lo uno ni lo otro, por actuar como grandes entre los grandes, sin comprender aún, que el que vive y anda como el más pequeño entre los pequeños, es quién verdaderamente se hace grande ante los ojos del Padre Supremo, y no aquél que la soberbia y el orgullo de un poder, solo le sirve para humillar a sus hermanos.

No adquirimos, memorizamos un conocimiento, y en los Sitiales de la Obra agachamos la cabeza con falsa modestia, solo para ajustarnos al escrito que dice; el que menos tiene sabiduría y el que menos tiene inteligencia. Pero la verdad es que, por aquel breve conocimiento que no logramos comprender, inflamos nuestro pecho como globos a punto de reventar, y nos creemos sabios entre los sabios, cuando no nos asiste ni un mínimo de inteligencia, porque evidentemente seguimos revolcándonos como bestias en el fango de la Tierra, de las bajas pasiones, y demás vicios que impiden la evolución del espíritu…

EN ESTE GRAN DÍA DE CUERPO MÉDICO ESPIRITUAL EN LOS ESTUDIOS ASTRALES ESPIRITUALES ANTE DIOS

…Que dice: Yo pido al Supremo Creador que los rayos de la luz nos cubran y sean curados los pacientes en el nombre de mi Padre Celestial, porque la caridad y el amor llegue a todos los corazones donde hay la palabra de Dios. Entonces los rayos de la luz mi Padre nos dé, para alejar la oscuridad que está penetrada en los pacientes. -Ismael Garzón Triana-

Os digo; por el mal proceder, la oscuridad ha invadido los corazones de quienes se han puesto al servicio de Dios Todopoderoso, porque la ausencia de amor y de caridad, no permite que la luz del Padre Supremo penetre en nosotros. Entonces, mientras no limpiemos nuestro espíritu con la moral aplicada a cada uno de nuestros actos, no actuaremos más como intermediarios en la curación de los pacientes, porque bien sabéis que sólo la luz interior puede alejar la oscuridad que nos rodea, y al estar inmersos en ella, continuaremos viendo ruinas espirituales maléficas y desolación en los Estudios.

CIERTAMENTE NO HEMOS COMPRENDIDO ESTA HERMOSA ENSEÑANZA; POR ESO NADIE, NI TAN SÓLO UNO, LLEVAMOS LA OBRA COMO LA LLEVÓ EL MAESTRO ISMAEL.

-Héctor Fabio Cardona-

viernes, octubre 14, 2022

¿Por qué tanta apatía conla Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios?


Así como nadie puede plasmar nuevas palabras sobre papel ya escrito; así mismo no podemos edificar nuestro nuevo hogar sobre terreno ya construido.

Para realizar tal cosa, es preciso borrar para escribir nuestras propias líneas, y derrumbar lo que, con cimientos débiles por las imprecisiones, otros edificaron en nosotros.

El buen constructor busca preferentemente un terreno limpio; pero a falta de ello, limpia, realiza un barrido excavando profundamente retirando todo aquello que pueda impedir una excelente cimentación, porque si construye sobre los restos de una edificación desgastada, su obra sucumbirá y se hundirá.

Acaso no dice el Maestro Ismael en su Obra:
Cual camino lleno de vacíos, en el cual hay que construir las gradas para pasar; pero gradas bien construidas, porque si el material es malo, se puede derrumbar

Entonces hermanos de mi espíritu, no me juzguéis por mi forma de decir las cosas; pues mi único deseo es alzar el tono de mi voz para que caigáis en cuenta que, si no modificáis vuestra forma de pensar, seguiréis nadando en contra de la corriente en aquel mar de confusión y distracción, producto del vacío espiritual, y de las bagatelas con las cuales el humano llena su mentalidad, y por ende su vida, sin dejar tiempo ni espacio para el verdadero conocimiento espiritual. Si realmente es vuestro deseo estudiar las Leyes Espirituales, os ofrezco mi tiempo y disposición para apoyaros, para ayudaros a realizar tal cosa.

Lo que invertiré en este nuevo proyecto es uno de los bienes más preciados y escasos con los que cuenta el ser humano; el TIEMPO. Y si yo estoy dispuesto a compartirlo con vosotros y vosotros conmigo vuestro muy preciado tiempo, entonces no hay lugar para la terquedad ni el capricho, pues nadie puede obligar a alguien a realizar un cambio en su vida, sin violentar su libre albedrío.

Entonces, si vosotros, el que así lo deseé y de verdad quiera participar sin avergonzarse de compartir la Obra del Maestro Ismael, ni avergonzarse de ser visto como mi amigo a pesar de saber que todos somos hermanos como hijos de un mismo Padre Creador de todo cuanto existe, si realmente estáis dispuestos a no perder vuestro tiempo ni hacer perder el mío, BIENVENIDOS a este nuevo espacio. Pero si, por el contrario, veis que os resulta dificultoso desligaros de vuestras viejas ataduras, si para vosotros es más importante el escenario del bullicio, de la algarabía, de la farándula, del mar de grupos y amigos a los que pertenecéis pero que no conocéis realmente; si para vosotros es más importante otros conocimientos que aquel al que pedís ingresar libremente; entonces os sugiero quedaros en donde estáis, que yo seguiré participando a mis hermanos la Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, aunque no estéis como contactos del perfil en donde he venido publicando la Enseñanza.

Por tal razón veréis que, a modo de respeto, he eliminado casi todos los contactos en Facebook; pues nunca participan, y ello lo tomo como si estuviesen a la fuerza en un sitio donde no quieren estar. Esto me da vergüenza porque no quiero que, por pena, mis hermanos pierdan su tiempo, pudiendo invertirlo de mejor manera donde realmente se sientan a gusto, y donde estén seguros de alcanzar el discernimiento que aquí no han podido encontrar.

No es necesario que un hermano participe impartiendo conocimiento para estar en el grupo; basta con su deseo de aprender; pero sin dar mal ejemplo en sus publicaciones. Tampoco es necesario que esté publicando en todo momento la Enseñanza; pero os digo hermanos de mi espíritu, que si no hacéis, no deshagáis tampoco, porque no es correcto hablar en un espacio de nuestras vidas de amor, justicia y paz, mientras por otro lado incentivamos el odio y la persecución, haciendo la guerra a quienes no piensan como nosotros; pues hacer tal cosa, es una burla y un irrespeto para los preceptos de la Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios, cuya base y fundamento es el RECONCILIO y el PERDÓN.

Si os avergonzáis de esta humilde Enseñanza, no podréis ser capaces de sembrar y menos de cosechar; pues la cosecha para que no se malogre, ha de entregarse a nuestros hermanos, y ciertamente no comprendo cómo puede hacerse tal cosa cuando no hay amor ni voluntad ni regocijo en compartir el legado del Maestro Ismael.
No os digo que no podéis conocer, aprender de otras enseñanzas porque sería un fanático si esto dijere o hiciere; pero el acto de ESTUDIAR, demanda esfuerzo, dedicación, consagración. Lo demás, es simple curiosidad.

Hermanos de mi espíritu, nunca debéis de confundir una persona espiritualista que, a fuerza de leer, de andar aquí y allá acumula una serie de saberes, con un espiritista, con un estudiante de una filosofía espiritual, cualquiera que esta sea, porque se centra en el estudio hasta alcanzar el discernimiento de la Leyes Espirituales, de los Mandatos Divinos, mientras el otro no echa raíces en ningún lado.

Sabed entonces que, “Los hay quienes solo hablan para ser oídos, y los hay quienes saben llegar al corazón al ser escuchados…”

No os sintáis excluidos ni que estoy indispuesto con ninguno de vosotros, ni que os juzgo ni señalo al haberos eliminado de este perfil; sólo, que llegó el momento de definirnos como verdaderos sembradores de la Obra que el Padre Supremo concedió para el bien de la humanidad por intermedio del Maestro Ismael Garzón Triana; y que, en potestad de vuestro libre albedrío defináis también ¿En cuál de los muchos huertos de aquella Majestad Divina, queréis sembrar, cultivar y cosechar?

Entonces, todo aquel que realmente quiera estudiar bajo estos preceptos; seáis NUEVAMENTE BIENVENIDOS a este espacio.

Os doy mi agradecimiento,
-Héctor Fabio Cardona-

miércoles, octubre 12, 2022

Relevo generacional

 



Buen día para todos mis hermanos.

Abro debate sobre la importancia del RELEVO GENERACIONAL de las futuras comarcas de la Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios.

Esta hermosa Enseñanza pudo ser plasmada en el plano terrenal para el bien de la humanidad, primeramente, gracias a la voluntad del Padre Supremo, y gracias al esfuerzo, a la fortaleza, al amor, a la consagración, a la voluntad férrea del Espíritu que movilizó la materia de Ismael Garzón Triana, su fundador. El amor hacia el Padre Supremo y hacia sus hermanos, fue el incentivo que le permitió salir avante en la tarea, en la misión que le fue asignada a su espíritu.

Mientras el Maestro Ismael estuvo al frente de su Obra, la Enseñanza creció, se multiplicó, se expandió por gran parte del territorio de nuestra amada Patria Colombia; y gracias a su gestión, a su guía, a su orientación, cada Estudio que era inaugurado florecía, aunque hubiese ignorancia intelectual en sus dirigentes, porque éstos fueron muy bien preparados, y porque en sus corazones había Amor, Fe, y Esperanza.

Los facultados se multiplicaban, las labores y enseñanzas daban sus mejores frutos en conocimiento para el espíritu, lo mismo que en curación y sanación para la materia, a pesar de la fuerza contraria que desde el inicio ejercían los detractores contra la Obra y contra el autor.

No obstante, una vez desencarna el Maestro, todo se desajusta, todo se desarmoniza, todo se desequilibra, dando inicio a una era, a un periodo de incomprensión ante los conflictos que emergen por la envidia espiritual de los unos contra los otros y viceversa, cubriendo con su manto lóbrego hasta el día de hoy, a aquellos hermanos que se dejaron conquistar por el ansia de poder, por el orgullo y la soberbia.

Quien eligió trabajar para la tenebrosidad antes de encarnar, no podrá ir contra su propia naturaleza, aunque lo intente. Pero podrá preparar el camino para la próxima encarnación.”
-Hermes Trismegisto-

Al tiempo, unos pocos se mantenían firmes en el cumplimiento del deber, fieles a su Maestro, a su guía, gozando hoy del esclarecimiento que han alcanzado sus mentalidades mediante el estudio y acatamiento de los Mandatos Divinos, y del respeto por lo plasmado por el Maestro Ismael en su magna Obra Estudios Astrales Espirituales Ante Dios.

¿Quién estudia? ¿Quién ama? ¿Quién respeta? ¿Quién se reconcilia? ¿Quién perdona? Muchos no podemos responder…

Ciertamente la luz para el espíritu se adquiere a través del conocimiento; pero el conocimiento en sí, sin ser aplicado, es un saber que carece de fuerza; porque "la retórica sin buen ejemplo, es letra muerta".

Cuando el daño está hecho, el rebote es imparable. Los despiertos que a sabiendas violan La Ley de Causa y Efecto, lo sufren inmediatamente, con decrepitud y muerte.”
-Hermes Trismegito-

En un futuro inmediato, para evitar la soledad, la desolación en los Estudios, se hace necesario cultivar las semillas del relevo generacional. Me refiero a aquellos espíritus que, movilizando materias tiernas, a pesar de traer cada uno su carga, sus mentes aún no han sido corrompidas por la avidez, ni por la avaricia ni por el ansia de poder, siendo más fácil dirigirlos hacia el bien, hacia la luz, porque en la tarea asignada y aceptada por ellos espiritualmente, está la misión de sobreponerse a sus causas y así adquirir el conocimiento que permita la evolución para su espíritu, porque tienen sed de conocimiento, no de poder.

Son la futura comarca, las nuevas generaciones, el relevo de los sembradores de las semillas de Amor y Paz, de Justicia, de Reconcilio y de Perdón; son los cultivadores que cosecharán y entregarán a la humanidad, el trébol frondoso que el Maestro espera encontrar. Más, no hay una planificación, porque hay muchas circunstancias que la entorpecen; una de ellas, la envidia espiritual.

Quien irradia sabiduría, es un maestro puntual. No dependas de él. No te aferres a él, no idolatres su figura, no creas que es perfecto, no pienses que es superior a ti. Solo es una ráfaga de aire en tu sendero. Aquel que, por irradiar se sienta con potestad sobre ti, no es un maestro de la luz. Un verdadero maestro de la luz, ama y respeta tu libertad.
-Hermes Trismegisto-

Es hora de avanzar en conocimiento, en luz, no en oscuridad. Es hora de aplicar los preceptos de la Obra; reconcilio y perdón…

No debemos mal invertir el poco tiempo que nos queda en señalamientos, en críticas ni en justificaciones ajenas ni propias. Tampoco podemos seguir secando nuestras gargantas llevando un mensaje que no quieren escuchar. Llegó el momento de organizar los grupos que verdaderamente anhelan escuchar, que verdaderamente quieren aprender; y clamar a Dios Todopoderoso Infinitamente Justo, por aquellos que su terquedad, sus apasionamientos los aleja del conocimiento de las Leyes Espirituales.

Si alguno de vosotros está dispuesto a estudiar, a aportar, a dejar a un lado de vuestro camino las distracciones de las bagatelas que os resta voluntad, tiempo y fortaleza, a dejar el señalamiento, la crítica, para emprender el camino del esclarecimiento de las mentalidades; os comparto mi tiempo, mi amor, mi apoyo y ayuda, para que unidos estudiemos esta hermosa Enseñanza.

Si veis que podéis daros una nueva oportunidad despojándoos de los conceptos preestablecidos, de las malas interpretaciones, de aquel cúmulo de información que en vez de esclarecer confunde vuestra mentalidad; entonces sed bienvenido a este nuevo grupo de estudio. De lo contrario; os pido no ser distracción ni talanquera para quienes realmente desean estudiar.

Invito a aquellos espíritus sabios, genios en el esclarecimiento de las LEYES ESPIRITUALES, a que hagan su aporte en este nuevo espacio.

Se acabó el tiempo de echar la medicina al rio suponiendo que el pueblo entero quiere mejorar; pues visto está que todos no han hecho solicitud de tal cosa; por lo cual, ya no basta solo con querer estar; llegó también el tiempo de luchar, de tocar y tocar para pedir que la puerta sea abierta.

Si os avergüenza compartir públicamente la Obra del Maestro Ismael, no puedo violentar ni irrespetar vuestro libre albedrío; solo que tampoco puedo permitir que irrespetéis el mío. Más os digo; no debéis seguir dos caminos a la vez, porque ciertamente no aprovecharéis ni uno ni otro. Seguid el que más se ajuste a vuestros requerimientos, a vuestras ansias sin mirar atrás.

Debéis de definiros por ¿Cuál sendero queréis transitar?
Sin embargo os digo; muchos son los senderos que conducen al retorno del Padre Supremo.

-Héctor Fabio Cardona-


lunes, octubre 10, 2022

¿Quién eres realmente?

 



¿Practicas el budismo, el mahometismo, el cristianismo, el mormonismo, la doctrina espírita, el catolicismo, el hinduismo, el judaísmo, la gnosis, etc., etc., etc.…?

Ahora, si no pertenecéis a ninguna de ellas porque decís que sois "estudiantes de los Estudios Astrales Espirituales Ante Dios"; fijaos bien en lo que os voy a decir, porque estáis equivocados si ello aseguráis, ya que, si abrís los ojos por un instante, si despertáis de vuestro letargo, os daréis cuenta que todos ellos defienden y promulgan lo que estudian, lo que aprenden, y aquello que llegan a saber, porque hay verdadero agradecimiento en su corazón. Por ello defienden, aman y respetan su enseñanza, acatan sus preceptos; y la mayor parte de su tiempo lo dedican a sembrar y a cultivar en su propia tierra para conquistar simpatizantes para su causa, no para la ajena...Nunca veréis a ninguno de ellos aprendiendo en escuela foránea para ir a enseñar en la suya, porque tienen sentido de pertenencia, porque creen verdaderamente en lo que los guía, y tienen fe en el resultado de lo que hacen; más vosotros, no tenéis amor por vuestra enseñanza porque estáis llenos de dudas, de inconformidades, y ello os ha dejado sin identidad; por ello es que os pasáis curioseando, husmeando en todas y cada una de aquellas enseñanzas sin lograr aprender de allá ni aprender ni cumplir acá.

Aun así, llamáis sectarios a aquellos nuestros hermanos que tienen firmeza de obra y pensamiento, cuando no los calificáis también de fanáticos por amar, respetar y defender su causa; mientras vosotros, tristes marionetas errantes, que por vuestra ingratitud y desidia os habéis hecho extrañados por vuestra propia decisión y voluntad, a la Obra que tanto decís “amar”, estáis procediendo como el mendigo al no lograr alimentaros del pan espiritual de aquí ni del pan espiritual de allá, porque nada os llena por la indecisión.

Más os digo hermanos de mi espíritu; todos los caminos de conocimiento de las Leyes del Padre Supremo conducen de retorno a la presencia de aquella Majestad Divina cuando se transitan con amor, con respeto, con voluntad y abnegación ante el servicio que se presta...

Escucharéis a la gran mayoría de nuestros hermanos deciros con regocijo: venid, conoced nuestra enseñanza; más no, llevadme a conocer la vuestra.

Sabed que eso no los hace fanáticos ni sectarios; simplemente, comprometidos con la parte de la verdad que eligieron representar.
Más vosotros, que os hacéis que trabajáis, lo hacéis con desgano, sin fe ni esperanza en vuestra tierra, porque vivís pendiente de lo que se cultiva en el huerto de vuestro vecino, ignorando que el día de la cosecha, todos los huertos del Padre Supremo, al igual que los campos terrenos cuando se cultiva como corresponde, sacarán sus mejores frutos para alimentar a la humanidad.

Sabed que en unos labrantíos se siembran unos alimentos, en otros, otras variedades...y vosotros, ingratos, que tenéis el terreno fértil, apropiado para cultivar y cosechar gran diversidad de alimento espiritual, miráis con envidia lo de vuestros hermanos porque no habéis aprendido a amar lo vuestro, y por ello es que no cumplís a cabalidad con la labor que os ha sido encomendada desempeñar en vuestra obra.

Despertad hermanos de mi espíritu para que podáis definir vuestras prioridades, vuestros anhelos, vuestras ansias en lo espiritual, y así elegir el sendero que verdaderamente queréis transitar, porque nada hacéis engalanando la casa de vuestro vecino, cuando la vuestra está en desorden y descuido.

Por ello es que, en vez de estudiar la Enseñanza del Maestro Ismael, os habéis dedicado a cambiarla, a modificarla, al traer teorías, hipótesis, esclarecimientos foráneos para imponer en los Estudios Astrales espirituales Ante Dios, al considerarla irrelevante para ser presentada a vuestros hermanos tal y como la dejó su autor; y ya veis el resultado de vuestras acciones, de vuestro irrespeto, que, si vosotros mismos que os llamáis siervos y conocedores de esta gran Obra, estáis inconformes con lo que tenéis; ¿Qué podrá esperarse entonces de las nuevas y futuras comarcas?

Lo cierto es que os avergonzáis de la Enseñanza del Maestro Ismael; y so pretexto de salvaguardarla, os escudáis en ello para no compartirla, para no difundirla, y así encubrir vuestra desidia y vuestra ingratitud.

No os digo que no haya conocimiento, que no haya amor y respeto en otras enseñanzas, solo que no tiene sentido laborar en un Sitial, y promulgar lo que se hace en otro.

Respeto y gradezco a mis hermanos de todas las religiones, de todas la doctrinas, de todas las filosofías, conocimiento y enseñanzas espirituales del mundo entero, por trabajar con esmero y sin descanso para llevar su legado al resto de la humanidad.

Toda secta es buena, los malos somos los que no la sabemos llevar.” Dijo el autor, Ismael Garzón Triana.

Hablo, susurro a mi propio oído, no al vuestro.
-Héctor Fabio Cardona-