Pregunto hermanos de mi espíritu; ¿CUÁNTAS veces al día EXAMINAMOS nuestros pensamientos, nuestras acciones cotidianas con la idea de esclarecernos, de hacernos conscientes de nuestro proceder, con la idea de efectuar una ablución interior y fomentar el buen hábito de la HIGIENE de nuestra alma?...

Ahora pregunto; ¿CUÁNTAS veces al día activamos nuestro dispositivo MÓVIL, PC o PORTÁTIL para revisar WhatsApp, Facebook, Twitter, Instagram o YouTube? Os digo que son innumerables las veces que ingresamos a ingerir la dosis para narcotizar nuestros cerebros con aquel OPIO electrónico hasta ralentizar y doblegar nuestra voluntad, para después, con nuestro consentimiento pero como autómatas, permitir la reprogramación gradual de nuestra mente con los paradigmas triviales que nos incuban en cada vistazo a los distintos perfiles, y que poco a poco nos despojan de nuestra verdadera esencia, de nuestras verdaderas identidades, alejándonos de la realidad y esclavizándonos a aquel mundo virtual en el cual se crean familias según la afinidad perniciosa en ambición, orgullo o avaricia que se endosa a éstas comunidades, en las cuales se determina la forma en que cada persona debe actuar sin darse cuenta, haciéndonos creer que somos libres de opinar, de escoger y hasta de rechazar, pero no es así. Y así, mientras cada día invertimos más tiempo frente a las pantallas polinizando cual abejas virtuales, los perfiles con me gustas, con Likes y demás; mientras invertimos menos tiempo de calidad a nuestra familia, a nuestros hijos, cónyuge y amigos, porque todo es recíproco; ellos han caído también en esta TRAMPA QUE NO MATA, PERO QUE TAMPOCO LIBERA.

Por doquier se ven los zombis hincados ante las pantallas, sumergiéndose cada día más en aquel mar de confusiones; y bien que podríais observarlos hermanos míos, si por un instante mientras vais rumbo a vuestro trabajo o de regreso a casa, despegarais la vista de vuestro dispositivo móvil. Entonces si os apartaseis por unos cuantos minutos de la manada, los veríais desesperados, angustiados cuando les falta la dosis del sedante ante la caída de las redes, el Internet, o ante la poca acogida de sus publicaciones insulsas y pueriles.

En realidad, no trabajan para el bien de una comunidad, y mucho menos con amor para expandir un conocimiento; sino para adquirir popularidad en las redes sociales, así no comprendan lo que comparten, porque muchos corazones están endurecidos como piedras por el resentimiento, por el odio y el rencor que no permite perdonar y vivir como verdaderos hermanos.

Pocos son los que escapan a este vicio, a este sofisma, por la comodidad de este mundo donde no hay la necesidad de soñar, sólo dormir porque todo se encuentra al alcance de los internautas. Tampoco hay necesidad de leer o estudiar, porque todo está dicho; sólo basta buscar, copiar, pegar y compartir para hacerse célebre orientador, y merecedor de una buena cantidad de Likes que elevan el ego y de paso a el vacía el alma.

Pero os pregunto y me pregunto nuevamente; ¿qué es lo que estamos haciendo al hacer VIRALES temas que carecen de fundamento, lo mismo que noticias que en su mayoría son engaños que sólo incentiva al odio, a la venganza, y que, sin digerir, se engullen afanosamente como el más estimulante de los tragos; mientras que las verdades se ingieren con gran cautela en pequeños sorbos?

Os diré el por qué…Cuando la persona ingresa a sedarse en las redes sociales, y no a nutrirse verdaderamente con la investigación de un tema específico que le permita pensar por sí mismo, el individuo deja de existir como ser individual, para convertirse en la gran manada dirigida por hilos invisibles, formando innumerables cardúmenes temerosos, pero finalmente mansos y pasivos, que se dirigen a las fauces del gran devorador.
Éstos se reúnen alrededor de un tema trivial que poco aporta a su crecimiento personal, y menos a su crecimiento espiritual; o alrededor de una noticia que no digieren y que no alcanzan a imaginar el daño que causan al difundir inexactitudes, pero lo importante para muchos es cliquear me gustas y likes, y compartir para conseguir más contactos y no ser aislado de la masa, de la comunidad; YA QUE EL ERROR COMPARTIDO POR MUCHOS CUESTA MENOS POR CABEZA.

El despojarse de su esencia, de su verdadero yo, para mal invertir el tiempo que es irrecuperable sin tener un propósito; es vivir una vida espiritual inútil, es esclavizarse y laborar sin remuneración alguna para los medios de opinión que sí abultan cada día sus arcas, mientras la manada difunde, esparce y cree que opina sobre lo que no conocen ni les compete solucionar porque sencillamente no están preparados para ello.

No pretendo boicotear las redes sociales, ni satanizarlas, porque en realidad pueden ser útiles y provechosas, tanto como decidamos emplearlas de la mejor manera; pero os digo que todo en exceso es perjudicial, porque aún el medicamento que conlleva las propiedades curativas, se vuelve tóxico también sino se dosifica correctamente.

Os pregunto una vez más; ¿Cuántas veces al día se revisan las prioridades personales más inmediatas que sí está en nuestras manos solucionar y que sí afectan nuestras vidas...? ¿Cuántos son los que en sus vidas materiales y espirituales tienen grandes planes, grandes metas, así como grandes conocimientos para compartir, y que seguramente engrandecerían no sólo sus espíritus, sino también el de sus hermanos, pero al ingresar al mundo virtual, se olvidan los deberes corporales y espirituales, avergonzándose de aquello que ostentan en privado, pero de lo cual se avergüenzan en público? entonces ¿Por qué se dice Dios mío, yo amo a Dios, si en verdad no se siente el anhelo de volver a Él?

Sé que muchos se alejarán, se darán de baja de esta página; pero os digo, "no os ofusquéis por lo que yo diga o deje decir, pues la verdad será siempre la verdad... y si coincido con ella la veré engrandecerse; pero si no, ella permanecerá siempre inmutable, invulnerable ante mis desaciertos...”


Vuestro amigo y hermano,
Héctor Fabio Cardona.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Independientemente de que vuestra opinión sea favorable o no, sobre el tema publicado; nos interesa el conocer vuestro punto de vista, pues toda evaluación que se haga dentro del marco del respeto es valiosa para nosotros porque nos ayuda a corregir errores y a mejorar los aciertos.

BIENVENIDOS.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.